El otro lado de Minecraft

3. Intento fallido

No obstante sentí un empujón y todo se volvió negro. Cerré los ojos al parecer que me iba a estrellar contra una pared.

Al abrir los ojos hice una mueca de fastidio. Habíamos vuelto al mundo real.

Aunque no nos encontrábamos en el laboratorio por el que habíamos intentado entrar en Minecraft.

- ¿Alguien sabe dónde demonios estamos? - pregunté impaciente.

- Estos son arbustos Fremontodendron californicum, también llamados flores de franela. - dijo tras un breve análisis Raúl, que tenía un título en biología. Desde pequeño le habían encantado los animales y las plantas. - Estos árboles solo crecen en un sitio: Estados Unidos.

- ¿¡Estados Unidos!? - dijo Víctor con un tono de sorpresa e incredulidad.

- Sí. - reafirmó Raúl. - ¿Qué podemos hacer? ¿Y por qué no hemos entrado en Minecraft?

- Alomejor el propio juego nos rechaza. - Especulé yo.

- ¿Y cómo entraremos? - preguntó Raúl.

- De incógnito. - contestó Víctor. - Aunque lo primero es averiguar cómo salir de aquí.

Nos encontrábamos en un bosque. Caminamos durante unos segundos, pero al final admitimos que no teníamos ni idea de hacia donde ir.

De repente, oí un ruido.

- ¿Qué es eso? - preguntó Víctor.

- En Estados Unidos hay muchos osos... - dijo Raúl.

- ¿Osos? - dije yo. - Yo vi en un programa...

- ¡Calla, Dani! - me espetó Víctor. - ¡"El último superviviente" es todo una mentira!

- Sí. - respondió Raúl. - Tú saca tu espada.

Se me había olvidado por completo que en la mochila tenía mi espada y mi arco esmeralda.

Rápidamente saqué el arco y apunté hacia los matorrales que se movían. Fuera que lo fuera, se acercaba...

Víctor cogió su cuchillo y Raúl su puñal y se prepararon para el posible combate. Se acercaba...

Estaba allí...

Iba a saltarnos encima...

¡BAM! No pude contenerme más y disparé una flecha que dio en su objetivo: una ardilla.

Los tres volvimos a respirar. Tras una larga pausa decidí hablar:

- Bueno, deberíamos coger madera y hacer un refugio. Pronto se hará de noche.

Nota del autor

Ey, ey, ey, ¿cómo están ustedes? ¡Aquí les traje un nuevo capítulo! Sé que he tardado un poquito, pero no se me ocurría nada y he tenido varios problemas. Aún así, aquí está este capítulo.

Sé que es un poco aburrido, pero los próximos capítulo serán más interesantes.

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