¿Destino o Casualidad?/ Pablo Gavi

Capítulo 11

Había pasado un mes desde la hospitalización de Ali y desde que Gavi estaba enterado de lo que pasaba, aunque no había dicho nada, él siguió con su vida normal, visitaba a Ali, la llevaba a su casa luego de su turno en el bar, en algunas ocasiones la recogía del instituto, pero nada más que eso, no se había vuelto a tocar el tema del beso.

Sobre su relación con Ana, hacía varias semanas que no tenían uno de sus encuentros, ella le había estado dejando mensajes en reiteradas ocasiones, pero Gavi solo pasaba de ella.

Era viernes por la noche y el sevillano y su amigo se encontraban tirados en su habitación, cada uno con sus celulares hasta que alguien golpeó la puerta.

Pedri se levantó perezosamente y abrió, era Ansu.

-¿Os apetece una buena rumba?- Preguntó el jugador entrando al cuarto.

Pedri cerró la puerta una vez que su compañero estaba dentro.

-Estoy muy cansado- Respondió.

-Anda Pedri- Habló Gavi poniéndose de pie-Me parece una buena idea- Lo miró a Ansu.

El canario rodó los ojos.

-¿Dónde?-

-En lo de Frenkie, en dos horas-

-Vale, me apunto- Respondió el canario haciendo que sus dos amigos sonrieran victoriosos.

-Inviten a Ali, la recogemos-

Ambos asintieron, Ansu salió de la habitación y el canario comenzó a buscar que ponerse en su armario.

-Le enviaré un mensaje- Dijo el sevillano buscando el número de la chica entre sus contactos.

-Gavi, ¿aún no te ha dicho nada de lo de su familia?-

El chico negó con la cabeza sin apartar la mirada de su móvil.

-Es que, no me lo creo Pedri, no veo a Ali como una chica capaz de hacer algo así- Ahora sí, mirándolo -Además, se nota que es de buena familia, no le encuentro razón para que haya huído de su casa-

-Ni yo, por eso debemos escuchar la verdad de su boca-

El chico no respondió, entró al chat de la chica y le envió la invitación, luego bloqueó el móvil y lo tiró en su cama para ponerse a buscar ropa junto a Pedri.

(...)

 -Ha sido un mes de mierda, amiga- Ali se encontraba en videollamada con su amiga -Extraño mucho mi casa, a mis padres, quiero verlos y arreglar las cosas- Se notaba en su mirada la tristeza que guardaba dentro de ella.

-Te aseguro que tus papás están bien Ali, mamá va casi todas las tardes a tu casa- Le respondió -Varias veces hago que mamá sea mi espía, para ver como anda todo- Ambas soltaron una pequeña risa.

-De verdad, no se que haría sin vos-

-Piensa en positivo, detrás de todo este caos conociste gente maravillosa, y hasta te besaste con el futbolista del que toda España está enamorada- Ali rió -No hay lugar a quejas-

-La verdad que sí, he dejado gente en Argentina, pero la vida me dió personas hermosas acá-

-¿Y qué vas a hacer esta noche?-

-Nada, estoy súper cansada- Respondió -Llegué hace una hora del club y lo único que quiero es tocar mi cama- Sabrina asintió -Todavía no entiendo qué hacés despierta, son como las tres de la mañana allá-

-Las cuatro- Corrigió su amiga mostrando su dedo acusador -Acabo de llegar de la casa de Lorena- Lorena era una del grupo de amigas de Ali y Sabri -Estaba Mica también, te extrañan-