Capítulo 14

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Era sábado por la noche, Pedri, Ansu, Gavi, Ferran, Sira, Oli y Ali se encontraban cenando en un restaurante italiano en Barcelona.

-Joder, que buena pasta- Habló Olivia mientras comía.

-¿Cómo es que no hemos venido aquí antes?- Preguntó Ferran -Esto está espectacular-

Gavi soltó una pequeña risa luego dirigió su mirada a Ali que se encontraba a su lado.

-¿Te gusta?- Refiriéndose a la comida.

-Muy rico- Limpiándose la boca con una servilleta.

-Te daría un beso ahora mismo, me estoy conteniendo muchísimo- Le susurró el andaluz a la chica haciendo que se sonroje.

-Gavi, callate-

Ambos rieron.

Habían pasado casi dos semanas del escándalo de la foto, los medios seguían mucho a Gavi tratando de sacar algún tipo de información y los comentarios contra Ali no cesaban, pero tanto el sevillano como sus compañeros trataban de que ella no le dé tanta importancia a eso, aunque sabían que de una formo u otra le afectaban.

Sabrina no se había vuelto a contactar con su amiga por lo de sus padres, lo cual la tenía muy preocupada a la rosarina, pero decidió esperar un poco más, sabía que sus padres no eran personas fáciles de tratar.

Con respecto a Ana, Gavi no tenía rastros de ella desde la llamada avisando sobre la foto difundida, lo cual al sevillano le daba un alivio gigante haberla quitado de encima por un tiempo.

Mientras todos seguían comiendo, Gavi recibió una llamada, Ana.

Rodó los ojos con disgusto y cogió el móvil.

-Debo atender, ya vuelvo- Y se alejó de sus amigos.

Descolgó y habló.

-Hola- Seco.

-Hola Pablito, ¿me has extrañado?- Se escuchó.

-Dios, Ana ¿qué es lo que quieres? joder- Ya sin paciencia.

-Solo quería avisarte, que cuideis muy bien a tu amiguita- Rió.

-¿A qué te refieres?-

-Ali- Soltó.

-Ana, no me toquéis los cojones- Enojado -Con Ali no-

-¿Por qué tanta desesperación, Pablito?-

-Ali no te ha hecho nada- Tratando de controlar su furia -No entiendo a qué viene todo esto-

-Sí, gracias a ella tú no has querido saber nada de mí en estos meses-

-Ana, ya lo hablamos y tú no has querido entender, te creaste una fantasía que nunca iba a suceder, te he dejado muy en claro desde el primer día- Respondió.

-Sólo quería dejarte en claro que la cuideis- Dicho esto, colgó.

Gavi no podía contener su enojo, frotó sus manos por todo su rostro nervioso caminando de un lado a otro.

No podía decirle nada a Ali, pero sí debía hablar con su mejor amigo.

Volvió a entrar y se acercó a la mesa.

-Pedri, ven un segundo-

-¿Está todo bien?- preguntó Sira y Gavi asintió mirando a la argentina, quien estaba mirando su móvil y no se había percatado de que el español había vuelto.

El canario se puso de pie y siguió a su amigo hasta la salida.

-¿Qué ocurre?-

-Ana-

¿Destino o Casualidad?/ Pablo GaviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora