Tras la misteriosa muerte de su profesor, Daniel hereda un enigma que se entrelaza con lo sobrenatural y lo arqueológico.
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Estudiante desaparecido en Osorno es encontrado sin vida en la selva valdiviana: "Se habría perdido mientras hacía trekking" dicen las autoridades.
La comunidad estudiantil de la Universidad de Concepción se sume nuevamente en la tristeza tras la confirmación del deceso de Daniel Castillo, un joven estudiante destacado en el ámbito etnográfico, cuyo cuerpo fue encontrado el pasado 21 de diciembre en la selva valdiviana. Este hecho se produce apenas un mes después de su desaparición en Osorno, sumando una segunda pérdida a la institución tras el reciente suicidio del docente y antropólogo sociocultural, el doctor Eduardo Salas, quien se encontraba investigando un sitio arqueológico en la misma región.
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Las autoridades regionales confirmaron el hallazgo del cuerpo de Castillo en el Parque Nacional Alerce Costero, en una zona distante del área señalada para la travesía de trekking. "Se habría perdido mientras realizaba la ruta de trekking", explicó Gabriel Bustamante, subteniente de Carabineros.
Sin embargo, esta versión oficial no logra disipar las dudas que surgen entre la comunidad universitaria. Surgieron cuestionamientos acerca de cómo el cuerpo de Castillo terminó en una ubicación tan distante a más de sesenta kilómetros de Osorno, donde inicialmente se reportó su desaparición, lo que ha suscitado mayor intriga en torno a este trágico suceso.
"No descartamos la posibilidad de suicidio" reveló el comisario Francisco Cabezas, quien habría conversado con él poco antes de su desaparición. "El joven encontró el cadáver de su profesor en avanzado estado de descomposición. Creo que una experiencia traumática como esa pudo haberlo influenciado en su decisión de quitarse la vida".
Habría sido el mismo Daniel Castillo quien encontró el cuerpo sin vida del profesor Eduardo Salas, fallecido el pasado 31 de octubre en la ciudad de Osorno. La secuencia de eventos aún se mantiene en una nebulosa de incertidumbre, dejando a la comunidad universitaria con preguntas sin respuesta sobre la trágica muerte de estos dos destacados miembros de la institución. Las autoridades continúan con la investigación para esclarecer los hechos y procurar respuestas que al menos permitan arrojar luz sobre esta triste sucesión de eventos. Por el momento, la Universidad de Concepción guarda luto y aguarda con la esperanza de poder encontrar claridad en medio de esta nebulosa de dudas.
