Miraste la letra de la canción de cuna inglesa, desde que tu madre te la cantaba en tu infancia te sentiste atraída tal vez porque viene de un antiguo pergamino y que esa era la parte que se veía y no se sabía quien era aquel hombre que hizo todo por amor.
— ¡Baja ya llego tu prometido! — Te gritaron a lo cual bajaste.
viste a un chico de cabellos negros y ojos vendados, pero este no estaba vestido de traje por lo tanto no era tu prometido. Lo viste tenia el cabello rizado, pero despeinado y maltratado, su cabello estaba teñido con rubio.
— Se tiñe para parecer gringo y es mas cholo que perro sin raza— te murmuro Metis, tu hermana mayor.
miraste con atención a tipo y lo recordaste era Michael, chico que estuvo bueno esta enamorado de tu hermana Metis, pero esta solo tiene ojos para su novia Melínoe, esto hizo que ahora fueras la única heredera de las riquezas de tu familia y como tu padre era un machista que no confiaba en que pudieras adminitrar el dinero sola te estaba buscando un esposo.
— Siendo honesta el hermano esta mejor...creo que se llama Frey—. Te murmuro esta vez Melínoe fingiendo ser mucama para estar con tu hermana.
Tus padres te sentaron al frente de tu prometido y solo pensaste que era un asco se iban a casar al día siguiente por lo que los llevaron a practicar. En resumen todo fue un fracaso y tus padres te encerraron con un papel con los votos, pero ti hermana siempre fue buena y te ayudo a escapar de casa; aunque solo pudiste caminar por el bosque rayando con una rama para no perderte.
te sentaste mientras leías el papel con los votos.
— Solo son unas palabras...— te dijiste a modo de consuelo mientra mirabas el papel y repetias mentalmente.— Hola, joven Frey hermano de mi futuro esposo. ¿Qué? ¿quiere que le diga cuñado? cómo usted quieras...Mi amado, con esta que me has dado alumbrare junto a ti nuestro camino en la oscuridad, y; colocando este anillo en tu dedo te pido que seas mi esposo— y le colocaste el anillo a lo que creías que era una rama.
