¡𝘾𝙤𝙨𝙖𝙨 𝙦𝙪𝙚 𝙥𝙖𝙨𝙖𝙣!/𝙍𝙖𝙣𝙙𝙮 𝘾𝙪𝙣𝙣𝙞𝙣𝙜𝙝𝙖𝙢 𝙭 𝙇𝙚𝙘𝙩𝙤𝙧𝙖

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El partido terminó más rápido de lo que pensaba, efectivamente Bash y su equipo ganó, lo cual me alegra debido a que significa que no vine a perder mi tiempo. Me retiré del salón de gimnasia, me sentía mal por esse chico Bucky, pero no podía hacer nada ahora. Poco a poco me fui dirigiendo a los baños (obviamente los femeninos) y entré, al entrar vi un espejo.

-Dios mío- Dije mientras me veía -Que linda me veo.

Me acerqué al lava manos y lo abrí para lavarme la cara, todo estaba tranquilo, cerré el grifo y me volví a mirar al espejo cuando unos gritos me interrumpieron.

-Que tristeza, no avisaron que ya es Halloween- Dije mientras me reía pero en el fondo tenía miedo, salí lentamente del baño mientras me iba dirigiendo a dónde venían los gritos, ¿por qué? la verdad es que no lo sabía, pero la curiosidad me carcomía.

Entré a un salón que parecía ser de música y lo que estaba frente a mí parecía salido de una película "¿Qué putas?" Pregunté mentalmente mientras veía a Bucky convertido en monstruo destruyendo un piano.

-Bueno, yo cómo que me voy de aquí- Susurré para mí. De pronto Bucky se volteó hacia a mí y empezó a correr en mi dirección "Ya valí" pensé mientras me lamentaba por no tener mi testamento listo. Cerré mis ojos y de repente sentí unos brazos cargándome.

-Debemos dejar de andar topándonos así, ¿no?- Dijo mientras abría los ojos -Por cierto, nunca me dijiste tu nombre- Corría hasta un lugar seguro.

Al abrir los ojos me encontré con el Ninja -Ah, hola- Dije mientras mis mejillas se colocaban rojas -¿Podrías bajarme?- Pregunté, a lo que él me bajo.

-Entonces- El pronunció -¿Tengo el derecho de saber tú nombre?- Soltó una risita hasta que escuchó un gruñido y que arrojaban algo contra la pared -Dame unos segundos, ¿si?- Dijo a lo que yo solo me reí. El ninja fue a encargarse de sus asuntos. Bucky arrojó la flauta de la chica Flautista, a lo que el héroe enmascarado la atrapó y se la dio.

-Princesa Tootie, casi te pierdo- Dijo ella mientras la abrazaba.

-Ey tú, el de los cencerros- Dijo el Ninja -préstamelos.

Luego de eso el Ninja comenzó a pelear con Bucky, protagonizando así muchas escenas de acción, hubo un momento en el que le dio en la cabeza usando los cencerros.

-Oye, te hago una pregunta, Bucky- El dice mientras señala la parte de su pecho -¿Qué sucede exactamente aquí, en esta área?

-¡Si no puedo tocar el triangulo en la banda, nadie lo hará!- Dijo mientras la voz se le escuchaba modificada, como una especie de gruñido.

-Pero, ¿y mi política de no presumir?- La maestra dijo -¡Estaba presumiendo, todos lo vieron!- El ninja se quedó pensando, pero me di cuenta de algo, había un chico con unas maracas y Bucky empujó la estantería, parecía que se iba a caer.

-¡Ninja, la estantería!- Grité mientras le señalaba, el ninja al parecer reaccionó justo a tiempo.

-¡Se me cae!- Gritó el Ninja para que el chico saliera de ahí, y así lo hizo. Unos segundos después salió rompiendo la estantería para enfrentar a Bucky, el cual lo miró, luego a mí y se lanzó hacia una ventana para así escapar -Ay no- Exclamó el Ninja mientras veía como una parte del techo caía, yo lo miré haciendo una expresión de "¿En serio?" para que luego se callera un platillo, formando un silencio incómodo -¡Bomba de humo!- Dijo para luego desaparecer.

-Wow- Dije mientras miraba el desastre que habían hecho -Yo mejor me voy- Pronuncié mientras me retiraba de ahí.

Unos minutos después pude ver a la limusina, así que me acerqué y el Robo simio abrió la puerta da atrás, dejándome con Bash, el cuál se estaba comiendo algunos de los dulces que hay ahí.