-𝐈𝐬 𝐅𝐨𝐫𝐞𝐯𝐞𝐫 𝐅𝐨𝐫 𝐘𝐨𝐮?- (Spreen X Tú)

005

Narradora:

Bajaron de la camioneta blindada y entraron al hotel. Una multitud de streamers estaban frente suyo.

La azabache se quitó sus lentes de sol y miro con detenimiento el lugar, eran tantos creadores de contenido a los cuales admira, conoce a la mayoría, es muy raro al que no conozca.

Detrás de ella venía Osvaldo, Aldo y Roier. Todos juntos venían, pues no era demasiado tiempo de trayectoria y era muy innecesario gastar en un boleto de avión a la ciudad de México.

— Hasta que llegan, ojetes. — habló Rivers.

Llamo la atención de los cuatro y sonrieron.

— Hola, Rivis. — se acercó la azabache y la abrazó.

— Hola, Bubu. — correspondió su abrazo.

Llegaron junto a ellos Ari, Juan y Barca.

Todos se saludaron con un abrazo y un buen apretón de manos.

— Hay peda mañana, ¿van? — alzó una ceja Juan.

— Obvio, papi. — respondió con una sonrisa,  Roier.

— Vamos a ver a los demás. — menciono Ari.

Asintieron todos y fueron directo.

Un argentino miró cada uno de sus movimientos hasta verla desaparecer de su panorama.

Bebió de su bebida energética y una sonrisa se dibujo en su rostro.

— Déjale de ver el culo, amigo. — bromeó Carre.

— Nah, ¿qué decís? — negó riendo.

— Harán una reunión en un restaurante-bar y Juan no dejo de joderme hasta que aceptará — rodó los ojos —. Vamos, así sirve que miras un rato a tu minita.

— Puras pelotudeces decís; solo me causa curiosidad y ya. — se encogió de hombros fingiendo desinterés.

Una carcajada sonora salió de su amigo, para nada le creía, sabía que la mexicana provocaba algo en él.

— Sí, sí, claro. Seguro que ya estoy empezando a flashear con ella y con vos. — rodó los ojos divertido.

— Sí. — dijo y se fue de ahí.

Una carcajada más sonó por parte de su amigo.

[...]

_______:

— Sabe bien rica, wey — llevo una cucharada de cajeta a la boca de Filis —. Prueba.

Rió bajito, termino aceptando.

— Oh, cabron, si sabe muy rica. — abrió los ojos con asombro.

— Yo también quiero. — llegó Ama con ellos.

Habíamos llevado cajeta con nosotros, pues Roier más que nadie quería que ellos probarán la cajeta. Se la paso comiendo cajeta con cualquier cosa que se le atravesará y fuera comestible.

— Mhm — abrió los ojos de par en par —. Deja le llevo a Spreen. — comentó.

Por inercia rodé los ojos.

Se levantó de su lugar y se fue, lo mire salir de mi habitación.

— ¿Te gusta?