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El dolor incrementaba en mi cabeza, cerré mis ojos con fuerza pero poco a poco perdí la fuerza en mi cuerpo y no se que sucedió.

Al abrir mis ojos con lentitud y cansancio, era borroso, me quise levantar pero el dolor en mi cuerpo me lo impedía; escuché voces alrededor pero no distinguía de quien era, al ver al techo es blanco con lamparas blancas.

Despertaste cariño - habló una voz femenina

Lo escuché de mi lado izquierdo, giré mi cabeza lentamente de donde provenía esa voz y pude observar a una mujer entre treinta seis o cuarenta años de edad, su color de cabello es al igual que me vi, pero a diferencia del color de sus ojos, son color miel. Ella me miró aliviada mientras que yo la seguía mirando sin entender que estaba pasando.

El dolor de mi cuerpo me impedía moverme incluso no quería hablar, mi vista dejo se enfocó en otro lado y miré alrededor, estoy en un hospital.

¿Te duele algo cielo? - me preguntó esa voz 

¿Quién eres? - pregunté evadiendo su pregunta

Soy tu madre cielo - respondió 

Sentí como tocó mi mano izquierda con delicadeza, bajé mi mirada y el tacto que esta teniendo conmigo me hace sentir extraña, no entendía nada, se supone que había muerto, yo misma lo había hecho pero al abrir mis ojos, no entendía nada.

Escuché una puerta abrirse y al levantar mi mirada pude ver a un doctor y a ese hombre que dice ser mi padre, al cerrar la puerta ellos se acercaron con pasos lentos hacía nosotras. 

Me alegra tanto saber que despertaste cariño - me dijo ese hombre

¿Cómo te sientes? - me preguntó el doctor a mi

Me duele - respondí 

Tuviste un accidente hace poco - me dijo y lo miré fijamente - Estuviste en coma durante este tiempo hasta hace unas horas que despertaste 

Ella no me recuerda doctor - lo miró esa mujer 

Hice algunos estudios y todo esta en orden - le dijo - El golpe ocasiono una perdida de memoria pero desinflamó y es cuestión de algunos días para que ella recupere su memoria

¿Estás seguro que no es grave? - le preguntó al doctor

Después de sobrevivir que un caballo la derribará - dijo tranquilo - No tienes nada de que preocuparte Dan- Tae

Puso una mano sobre su hombro de él, se retiró de la habitación dejándome sola con esas personas. Los miré a ambos pero esa mujer se acercó a mi y me abrazó con fuerza.

Dan Tae.- La vas a lastimar cielo - le dijo preocupado 

Pero ella ignoro lo que le dijo, me sentí diferente.

Gracias a dios estás bien - me dijo ella - Pensé que nunca despertarías 

Ese hombre se acercó a nosotras, se sentó y tomó mi mano, lo miré sorprendida sin decir alguna palabra. Una sonrisa apareció en su rostro y mi corazón comenzó acelerarse.

No entendía que había pasado.

Yo misma me ataqué.

Y ahora despierto.

Tengo padres.


Renacer.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora