Renacer.

05

Pude ver a esa mujer ordenar con el chico encargado de caja, los miraba desde mi asiento mientras que ese hombre fue al baño. El hombre que conducía el auto esperaba desde adentro, mientras que yo analizaba.

Tenía que buscar respuestas, pero no se por donde empezar, primero el origen de esta familia, mis pensamientos flotan en mi cabeza que no me di cuenta cuando ellos dos volvieron, rápidamente sentí que me observaban y cuando reaccione los miré a los dos, ellos me miraron curiosos.

Su Ryeon.- ¿Te sientes bien cariño? - me preguntó

Si - respondí rápidamente - Lo siento pero estaba pensando 

Dan Tae.- ¿Te duele algo? - preguntó - ¿O que te tiene tan pensativa?

Lo lento que pasaron los días en el hospital - respondí un poco cansada 

Su Ryeon.- También para nosotros cariño - aseguró - Pero es un milagro que estés bien 

Tomó mis manos con delicadeza y me brindó una sonrisa, me sentí extraña. Desde que era niña nunca pude sentir esa sensación, mi vida fue a base de golpes, regaños y los dolorosos recuerdos de mi infancia.

Si es un milagro - murmuré 

Él estaba a punto de hablar cuando nuestras hamburguesas llegaron, cuando vi mi orden, mi corazón se aceleró y agradecí por la comida. Tomé la hamburguesa y le di el primer bocado, nunca imaginé que sabría tan bien.

La primera vez y la última vez que pude probar esto, fue en un bote de basura, cuando no tenía nada más, llevaba días sin comer, apenas pude salir de ese lugar y cuando hurgue el basurero vi un pedazo de hamburguesa, lo probé sin objeciones pero la experiencia fue desagradable pero el hambre era más fuerte.

 Pero ahora que puedo comer, para mi era la gloria, ellos me miraron felices y después de varios días, pude sonreírles sin pensarlo; comimos en silencio pero mis gestos en mi rostro eran muy notorios. Al terminar de comer, salimos del lugar y fuimos al auto donde nos estaban esperando; al estar dentro pude ver como los teléfonos de ambos sonaban y ellos no respondían.

¿No van a responder? - les pregunté a los dos

Dan Tae.- Esta mi secretario cariño - respondió - Di la orden que no respondería ninguna llamada

Ella asintió y solo los miré fijamente, asentí levemente mi cabeza y miré el trayecto. Pude ver las calles de la ciudad de día, era impresionante, los grandes edificios, las tiendas, los parques, todo era hermoso, parecía una niña pequeña y lo era en estos momentos.

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Miré dos puertas grandes, la curiosidad me estaba matando pero no quería preguntar y verme muy obvia, pude ver como ese hombre que conducía tomó un control y presionó una tecla y las puertas se abrieron, me sorprendí demasiado y el auto se adentro.

Miré casas muy lujosas de varios tamaños, niveles, colores y el tipo de arquitectura, no tendré grado académico pero lo poco que aprendí en ese lugar, pude tener conocimientos y menos de esa persona que tanto odio. El auto seguía avanzando mientras que seguía mirando pero al pasar una calle pude ver una casa de tres niveles, color blanco por fuera con un diseño bastante oriental.

Hay un pequeño camino de piedras en ambos lados y cuando el auto se estaciono en la cochera, esa persona bajo y abrió la puerta donde me encuentro yo, cuando mis pies tocaron el suelo, ese hombre me extendió su mano y al verlo, acepté. Con su ayuda y la ayuda de esa mujer, comenzamos a caminar por ese camino que conduce hacía la puerta principal.

Al llegar, ese hombre llamado mi padre, tecleo la puerta y se abrió. Al entrar todos, pude verlo por dentro y el lugar es muy acogedor, varias pinturas en las paredes, los tonos son claros y no luminosos, están respetando el diseño de la casa; con pasos lentos seguí mirando, miré un piano color negro en una esquina, una sala cerca de unas ventanas, con vista afuera.

Su Ryeon.- ¿Quieres ir a tu habitación cariño? - me preguntó 

Dan Tae.- Primero debe tomar sus medicamentos cielo - interfirió él

Su Ryeon.- Es cierto - giró a verlo - Iré a la cocina 

Él se acercó y tomó el lugar de ella y me llevaron al primer asiento y al sentarme, es cómodo y suave a la vez, es color beige y al mirar en una pequeña mesa, pude ver una hoja de color lila, él se sentó a mi lado y me la entregó.

Bienvenida retoño

Con un corazón y una pequeña margarita, la toque mientras que mi mirada esta sobre él.

Dan Tae.- Bienvenida - besó mi frente 

Gracias - hablé 

Dan Tae.- Antes de que llegué tu madre, el doctor me dijo que te realizó varios estudios y la inflamación de tu cerebro bajo - me dijo - Y hay algunas cosas que no recuerdas - tomó mis manos - No dudes en preguntarme, te ayudaré cariño

Mis ojos se humedecieron y asentí mi cabeza, me abrazó.

Dan Tae.- Todo estará bien ahora cariño - habló mientras me abraza - No permitiré que te vuelvas a lastimar