Back To You | Aldo Geo y tú

08| Sentirme tuya

Mi corazón seguía acelerándose cada cierto tiempo, estaba por creer que me iba a dar un infarto de no ser porque sabía la razón de mi nerviosismo, Aldo.

Trataba de portarme normal a su lado y él no parecía darse cuenta de lo que provocaba en mi, después de todo el siempre sería mi debilidad.

— Un gusto haberte conocido ___ — Me decía Roier ayudándome a subir las maletas al auto que habíamos rentado para volver a mi ciudad, solo firmariamos el divorcio y Aldo iba a regresar en ese mismo auto hasta Aguascalientes.

Y así terminaba todo.

— Fue genial pasar tiempo con ustedes — Les miré a ambas, nos despedimos brevemente y subí al auto mientras Aldo se despedía de sus amigos.

Suspiré. No podía seguir retrasando las cosas en poco menos de 3 semanas seria mi boda y estaba segura que mi hermana me mataría si no acababa con todo esto de una vez por toda.

"Deja de jugar y vuelve a casa" fue el mensaje que me había mandado anoche.

" Deja de jugar" pero ¿Que pasa si no estoy jugando?

— Tierra llamando a ____ — Aldo paso una mano por enfrente mío sacandome de mis pensamientos — Te pregunté si querías algo antes de comenzar el viaje.

Mire a mi alrededor y me encontré con el estacionamiento del Oxxo, al parecer ya habíamos avanzado y no me había dado cuenta.

— Galletas — Me límite a decir, Aldo asintió y bajo de auto para ir por mi pedido.

Rodé los ojos y me sostuve la cabeza con ambas manos, no sabía que estaba haciendo, esto me estaba volviendo loca, no podía verle igual desde aquel día que se había sincerado conmigo y él parecía no acordarse de nada, yo solo quería hablarlo, relajar mis pensamientos, me estaba confundiendo y yo también quería desahogarme ¿Por qué se sentía como si las palabras se atoraban en mi garganta en un acto doloroso de reprimir mis sentimientos?

— Aquí tienes.

De nuevo me sobresalté, Aldo dejó las galletas sobre mi regazo.

— Vaya, si que estás distraída ¿Qué te pasa?

Negué.

— Estoy cansada.

El camino siguió y yo recargue mi cabeza en la ventana para tratar de conciliar el sueño, pero en realidad seguía divagando, si me dieran la oportunidad de desahogarme ¿La tomaría? ¿Seria capaz de decirle todo oo que me había guardado? O ¿Ya no tendría sentido hacerlo?

— Mierda — Se quejó Aldo a mi lado cuando el bluetooth del carro comenzó a fallar dejándonos en el silencio absoluto. Incomodo — Creo que hay un auxiliar por aquí, ___ ¿Puedes buscarlo?

Me incorporé mientras buscaba en la guantera, el sonido de la carretera seguía de fondo y no podía sentirme más que incómoda.

Aunque pensándolo bien, no podía encontrar mejor momento que este para encararlo de una vez por todas, estábamos solos en la carretera, no podía huir.

— Aldo... yo queria... bueno, tenemos que hablar...

— ¡Olvidalo! Pondré la radio — Hablo el chico nervioso y activando la radio del carro a la velocidad de la luz.

Me quedé perpleja ante su acción tan extraña.

— Oye...

— ¡Mira! Acaban de decir que hay probabilidad de lluvia, me gusta la lluvia ¿a ti no?

Su actitud evasiva me hacía dudar ¿qué estará ocultando? ¿Por qué no querrá hablar conmigo?

El locutor comenzaba a presentar la siguiente canción y yo hablé más fuerta para que se diera cuenta que esto era serio.

— Aldo ¿Por qué actúas tan raro?

Entonces la canción sonó, se trataba de Your Love de the outfield, traté de hablar, pero Aldo volvió a ignorarme entonando la canción mirándome a los ojos.

— Josie's on a vacation far away
Come around and talk it over
So many things that I want to say
You know I like my girls a little bit older

Decidí callarme, aprecié como comenzó a bailar mientras me miraba cada tanto para seguir cantando la canción, creo que tenía un deja vú.

— I ain't got many friends left to talk to
Nowhere to run when I'm in trouble — Le secunde cantando la canción.

Aldo sonrió y entonces me guiño un ojo al momento de decir — You know I'd do anything for you.

Continúe — Stay the night but keep it undercover.

— I just wanna use your love tonight
I don't wanna lose your love tonight — Cantamos al unísono.

Ambos sonreímos y entonces una fuerza me obligaba a acercarme, Aldo miraba la solitaria carretera mientras disfrutaba la canción, no podía seguir esperando, no me importaban las consecuencias, quería hacerlo.

Sin previo aviso gire la cara de Aldo y le plante un beso en sus labios, Aldo frenó de repente, el sonido de la llanta quemándose en el asfalto me hizo reír, pero no me despegue ni un segundo de él,  el carro se orilló a un lado de la carretera y por accidente chocamos con una roca en el lado derecho.

El movimiento del leve choque hizo que nos separaramos.

Entonces Aldo se dio cuenta de lo que acababa de pasar, se quitó el cinturón de seguridad y bajo del auto para ver los daños, hice lo mismo y ambos notamos como la llanta derecha del carro había reventado por el golpe.

— ¿Por qué hiciste eso? ¿Acaso estas loca? Pudimos haber chocado — Me reprendió enojado.

— Estaba jugando al "no mames" —Sonrei con inocencia.

— ¿De verdad lo haces por eso? Escucha, aquella vez solo fue una travesura.

— ¿Y bailar al ritmo de Shakira? —Segui sonriendo.

— Oh vamos, seguro el vecino le encantó mi baile.

— ¿Brindar con agua mineral?

— Admitamos que fue un gran brindis.

Lo tenia justo donde quería, era un mentiroso, se acordaba perfectamente de todo, pero solo faltaba que lo admitiera.

— ¿Abrir tu corazón?

— Era un momento de debilidad, yo... — Aldo paró de pronto, sus mejillas se tornaron rosas y me miró con los ojos bien abiertos — Espera, creo que estamos hablando de cosas muy diferentes.

— ¿Lo crees? — Me acerqué lentamente hacia él, Aldo no se movió como si siempre me estuviera esperando.

Me dejo acercarme hasta que nuestras narices se rozaron, pero ninguno de los dos se atrevió a ir más allá.

— Déjame sentirme tuya.

Y entonces Aldo fue quien traspasó esa línea imaginaria que nosotros habíamos creado inconscientemente desde hace tiempo.

Aquella línea se borró al mismo tiempo en que comenzaba a caer una leve lluvia.