Danmachi: héroe encabronado

Capítulo 4: Semilla.

"levántate, mata, crece y gana. La victoria de un guerrero se asegura en sus cicatrices, porque estas son las medallas qué demuestran su valía".

"abuelo, ¿tener cicatrices me hará más fuerte?".

"ay mi pendejo, claro que no".

"pero el rey carmesí lo dijo".

"es porque era una época diferente, la época más violenta de la historia…".

"¿pero aún no había monstruos ni dioses verdad?".

"veo que eres listo, o por lo menos astuto. En esa época no se encontraban nuestros actuales problemas, pero algo que siempre ha acompañado al hombre desde el principio de su existencia son las amenazas hacia esta misma".

"¿cuales eran las amenazas para el rey carmesí?, el era muy fuerte, ¿como podrían siquiera asustarlo?".

"eres bueno con las preguntas mocoso… y la respuesta a eso es… je, ¿Sabes Bell? Puede que no se presente de una manera explícita en este libro, pero el Rey no solo batalló contra hambre, plagas, muerte y sobre todo, hombres… el se enfrentó a algo más, el luchó contra uno de los mayores males qué este mundo haya podido presenciar… Demonios".

"¡¿Demonios?!, creí que no existían, ¿Por qué ocultarían algo como eso?".

"por su seguridad Bell, por la seguridad de todos… puede que sea difícil, pero los humanos siempre fueron parecidos a los demonios, no solo porque los hombres puedan ser malos, es más complicado que eso; la diferencia con los otros seres como elfos, enanos, amazonas y personas bestias, no solo se encuentra en la apariencia, también está en el espíritu… muy, pero muy en el fondo, en lo más profundo del espíritu de uno de los primeros hombres existió la ya extinta semilla del mal".

"¿semilla del mal?, por eso la gente era mala?".

"era peor que eso, una vez que la semilla despertaba, toda moral o razón se esfumaba y el resultado fueron seres aberrantes qué actuaban de la forma más brutal y asquerosa qué este mundo haya presenciado".

"¿el Rey Carmesí los derrotó?".

"no, esta semilla fue propagada en toda la descendencia del primer hombre que la tuvo, a pesar de que ese primer hombre fue uno de los seres más amables de la historia, el daño que sufrió el mundo fue irreparable".

"¡¿entonces aún hay demonios por ahí?!".

"je, je, no te asustes pequeño, el Rey Carmesí no pudo vencerlos a pesar de que viajó por todo el mundo en busca de cada remanente de semilla para destruirlo, pero se dio de cuenta que era inútil, así que el creó un catalizador".

"¿catalizador?".

"así es, un lugar para contener el mal, un objeto qué contiene la ira de cien mil millones de demonios y antes de perecer en su trono, el se lo confío a un anciano con el que se llevaba muy bien. El furioso guerrero al final de sus días, después de haber derrotado a todos sus enemigos, se sentó en su trono qué se encontraba encima de los cadáveres de sus adversarios y finalmente, con una gran mirada de ira, el pudo descansar… ".

"¿cien mil millones?, el Rey es increíble… ".

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Bell: ammmmmmm~

Ya era de día, de eso estaba seguro, no tarde mucho en verificar que mi reciente actualización de estado no se trataba de una alucinación y con la hoja de estado en mi mano, me sorprendí una vez más.

"esto es increíble…".

Esto era una prueba de mi convicción, no recuerdo con claridad cuanto tiempo habré pasado dentro del calabozo, pero tuvo que ser un infierno si llegué a obtener ésto.