Confiésame / Jenlisa

Capítulo 45

Eran casi las 8:30 cuando Jennie finalmente bajó las escaleras. Por lo general, Jennie se levantaba a las 7:10, se lavaba, salía a correr y luego desayunaba a las 8:00 am. La única vez que se levantaba a las 8:30 am era si estaba enferma, o.... ejem..

La señora Hye le dedicó una sonrisa ambigua y Jennie quiso abofetear a cierto animal que la mantuvo despierta toda la noche.

"Buen día." Cuando Lisa vio a su esposa sentarse en la mesa e inmediatamente la saludó.

Jennie apartó la mano extendida de un golpe y respondió malhumorada "Date prisa y termina de comer para que puedas ir a trabajar. Deja de manosearme".

"Si." A estas alturas, se podría considerar que Lisa tiene algo de experiencia con esto. Su esposa generalmente estaba de mal humor a la mañana siguiente de una sesión de hacer el amor. Lisa pensó que había sido demasiado anoche. Tos... Realmente intentó con todas sus fuerzas contenerse, pero Lisa reconoció con tristeza que su autocontrol parecía ser inadecuado. No importa.

Cuando sale del trabajo, su esposa la habría perdonado.

Jennie empezó a desayunar y bebió un poco de avena. A decir verdad, si no fuera por el hecho de que quería desayunar con Lisa, se habría quedado en la cama. Lisa tartamudeó durante el desayuno y finalmente recogió las llaves del coche para ir a trabajar. Los días de semana, Jennie normalmente lo acompañaba hasta la puerta y la despedía, pero hoy estaba de mal humor y no quería despedir al animal.

Lisa se paró al otro lado de la mesa del comedor y miró en silencio a Jennie, esperando. Era dificil ignorar una mirada tan obvia.

"¿Qué?" Jennie no tenía palabras. "¿Tienes algo que decir?"

"Yo... Quiero un beso de despedida." Dijo Lisa, sintiéndose vacilante y avergonzada.

"..." Jennie miró a la mujer sintiéndose casi divertida por su actitud demasiado cautelosa.

Lisa pensó que el silencio de Jennie significaba que ella no quería. Sintiéndose ofendida, dijo "Tú... Ayer me dijiste que harías lo que te pidiera".

Jennie dejó la cuchara que sostenía y luego señaló con un dedo a la mujer.

Lisa inmediatamente se acercó a Jennie y se agachó considerablemente para acercar su rostro a ella.

Jennie le dio un beso rápido y superficialmente dijo "Está bien, ve a trabajar"

Lisa se enderezó con una expresión de satisfacción en su rostro. Sin embargo, justo cuando estaba a punto de salir de la habitación, escuchó a Jennie murmurar "Como una mascota doméstica".

Lisa sintió que tenía que responder, así que se dio la vuelta. Se inclinó y colocó sus manos sobre la silla de Jennie, atrapándola entre sus brazos. Sin previo aviso, inclinó la cabeza y besó los labios rojos de Jennie, dejándola sin aliento. Al ver la expresión de asombro de Jennie cuando ella se alejó, Lisa trató resueltamente de limpiar su nombre. "Una mascota no te besaría así, ni te impediría levantarte por la mañana".

Jennie parpadeo y luego volvió a parpadear. No podia creer que palabras tan sensuales salieran de la boca de Lisa.

"Volveré a cenar después del trabajo". Lisa besó la frente de Jennie y antes de que Jennie pudiera salir de su estupor, Lisa se da vuelta y se va.

Después de un tiempo, Jennie finalmente volvió en si. Murmuro para sí misma "Siento que algo anda mal con esto".

***

En el edificio de la Compañia Manoban.

Rosé salió del ascensor a una habitación familiar. Se acercó a las dos bellezas del departamento de secretaría y las saludo calurosamente "Hola bellezas, ¿Me extrañaron?"