Confiésame / Jenlisa

1 Extra: Lisa de la segunda vida transmigra a la primera vida de Jennie

Cuando los primeros rayos de sol de la mañana atravesaron el hueco de las cortinas, Lisa abrió los ojos. La mujer que aún no se había despejado del todo abrazó instintivamente a la mujer en sus brazos. Después de diez segundos de parpadear, levantó su cuerpo, le dio un beso de buenos días en el cabello a la mujer y se levantó para ir al baño y lavarse.

Cuando se escucharon los sonidos del agua en el baño, Jennie abrió los ojos. Miró en dirección al baño, con duda en su mirada. ¿Qué le pasó hoy? ¿Por qué de repente la besó tan íntimamente?

Después de un rato, los sonidos del agua cesaron. Jennie volvió a cerrar los ojos y fingió seguir dormida. Lisa salió del baño, entró en el armario para ponerse ropa deportiva y luego volvió a la mesita de noche para coger su teléfono móvil. Cuando Lisa encendió su teléfono, se mostró la fecha: 21 de octubre de 2022.

Al ver que no había mensajes sin leer en su teléfono, Lisa se lo metió en el bolsillo. Planeaba salir a correr y comprarle a Jennie algunas rosas en el camino. Las rosas en el jardin no florecerían en esta época del año, así que tuvo que ir a comprar algunas a la floristeria.

"Buenos días señora." La señora Hye, que estaba limpiando, saludó a Jennie mientras bajaba las escaleras.

"Buen día." Lisa, de buen humor, sonrió y le devolvió el saludo.

La señora Hye quedó atónita y su mano que sostenía un paño de cocina se congeló. No movió un músculo hasta que Lisa salió de la casa. ¿Parece que la señora estaba de buen humor hoy?

Lisa fue al patio y descubrió que Lego, que siempre corria con ella por las mañanas, no estaba allí. Llamó al perro dos veces pero no escuchó respuesta del perro. Si bien a Lisa le pareció extraño, finalmente no le prestó demasiada atención. Quizás Lego estaba ocupado jugando en la habitación de los niños.

Lisa salió por la puerta y corrió hacia la florería situada al pie de la montaña. Cuando llegó al cruce, descubrió que el paso de cebra, que ayer estaba a medio trazar, finalmente estaba terminado. Hizo que su leve trastorno obsesivo compulsivo finalmente descansara tranquilo.

"Jefe, dame una rosa". Lisa abrió la puerta de la floristería y llamó.

"Está bien." El jefe sacó una rosa y ató una hermosa cinta en el tallo. Se lo entregaron a Lisa y sonrieron. "Señora, ¿Se lo va a dar a su esposa?"

Lisa se quedó algo sin palabras, "Ya te he estado comprando flores durante varios años, ¿y todavía haces esa pregunta?"

El jefe vio a este 'antiguo cliente' pagar la rosa y salir de la tienda y parpadeó. ¿Tenían amnesia? ¿De qué otra manera podrían haberse olvidado de un cliente tan guapo?

Lisa salió con la rosa y miró su reloj. Por lo general, si regresaba a casa ahora, Jennie estaría despierta cuando ella regresara. Faltan sólo unos días para la fecha prevista de parto de Jennie, por lo que ahora pesa bastante. Lisa necesitaba regresar y acompañar a su esposa lo antes posible.

Mientras Lisa regresaba corriendo, ella él se perdió en sus pensamientos. Esperaba que este bebé fuera una niña. No quería otro niño, no fuera a ser como esos dos niños apestosos. Demasiados traviesos.

Cuando Lisa llegó a casa, la señora Jang acababa de terminar de preparar el desayuno. Se sorprendió mucho al ver a Lisa regresar con una hermosa rosa.

"¿Está despierta mi esposa?" Preguntó Lisa.

"Aún no." Respondió la señora Hye.

"La llamaré". Lisa subió las escaleras hacia el dormitorio. Cuando abrió suavemente la puerta y se asomó, descubrió que Jennie ya estaba despierta y todavía estaba en la cama, aturdida.