|IDIOTA| [Johnny Lawrence Y Tú]

𝗖𝗔𝗥𝗔𝗝𝗢

Después giré los ojos al sentir su presencia.

-¿Qué mierda Tn? ¿Venías con él?

-Ah, no.-Dije indiferente.

-Tu y yo tenemos de mucho de que hablar Tn. Y..., ¿qué demonios te pasó en el ojo?.-Recordé el golpe y un escalofrío me recorrió.

-No..., no recuerdo.-Dije nerviosa.

-Carajo.-Soltó y me tomó del brazo jalandome a alguna parte.

-¿Qué haces Johnny?.-Dije molesta. Él me empujó a la pared y me acorraló apoyando un brazo sobre la pared.

-¿Estabas con él?

-No.-Dije seca.

-Bien. ¿Y que le pasó a tu ojo?.-Dijo tomándome de la mandíbula y moviendo mi cara para verlo mejor.

-Johnny..., tal vez no es el momento...

-¿Perdón?.-Dijo y metió una mano por debajo de mi blusa, tocando y estimulando mi pezon.

-Johnny..., basta.-Dije tratando de ahogar un gemido.

-Si no me dices voy a bajar mi mano más debajo de tu abdomen y no voy a parar.

-Es..., escucha...

-¿Por qué desapareciste?.-Dijo sin parar de estimular.

-Por..., porque pasó algo...

-¿Qué fue lo que pasó?

-Basta Johnny, no es el lugar.

-Bien.-Dijo y me metió a un almacén que estaba cerca. Cerró con seguro y me acercó bruscamente a él.-Sabes que no me gusta que me ocultes cosas. No quieres que haga algo indecente.

-Johnny, no.

-Entonces contéstame nena. ¿Qué fue lo que pasó?.-Guardé silencio mientras lo veía con un pequeño brillo en los ojos. Él suspiro molesto.

Con su mano derecha tomó mi mandíbula, con su mano izquierda me pego más a él, y empezó a besarme muy desesperadamente.

-¿Entonces?.-Dijo parando.

-No..., no ha pasado nada...-Dije agitada. Él volvió a besarme, pero esta vez, metió su mano por debajo de mi ropa interior, ahora estimulando abajo.-Aah..., para Johnny, para.-Dije algo desesperada.

-Dime.-Dijo sin dejar de estimularme. Y soltando pequeños quejidos.

-Yo..., tu papá...-En cuanto dije eso él paró, sabía que lo haría.

-¿Mi padre? ¿Él qué?.

-Me despertó a gritos, me jaló y lastimó. Me sacó de tu casa y me golpeó...-Él me miró en silencio.-Ni siquiera regrese por mis cosas a tu casa y...

-¿Eso es lo que te pasó en el ojo?

-Sí...-Johnny tomo mi mejilla y me dio un pequeño beso.

-Maldita sea Tn, ¿por qué no me llamaste?

-Yo..., no sé.-Él me ayudo a incorporarme de nuevo para salir, abrió la puerta y me tomó de la mano.

-De ahora en adelante no vas a estar sin mi, ¿de acuerdo?.-Yo asentí.

Nos dirigimos a clases, en todo el día no hubo nada muy interesante, hasta la hora de salida.
Johnny y yo nos dirigíamos a su moto, él me tenía en brazos cargada y ambos estábamos riendo, hasta que Ali intervino.

-¡Johnny! ¡Johnny, detente!.-Él se giro e inmediatamente se le borro la sonrisa que unos instantes antes tenía.

-Bajame.-Le dije. Él me bajo, sin embargo me tomó de la cintura evitando que me moviera de su lado.

-¿Qué pasa?

-¿Nos veremos esta noche?.-Dijo ella tocando su brazo.

-¿Para qué?

-Tu sabes Johnny, no me hagas decirlo frente a Tn.-Yo tenía una cara de disgusto. Johnny me miró y después de nuevo a Ali.

-Tienes razón.-Dijo, me cargo y puso en uno de sus hombros.-No tengo tiempo.

-¿Qué haces Johnny? Bajame.-Dije.

-Calla Tn.-Me contestó.

-Si ella no quiere, no tienes por qué cargarla.-Rodeé los ojos.-Además, ¿por qué no tendrías tiempo?

-Porque estaré ocupado.-Dijo poniendo una mano sobre mi culo.

-Idiota.-Susurré.

Johnny nos dirigió a su moto y después me bajo. Lo miré mal, él tomó mi mandíbula y me dio un beso. Después condujó a su casa.

-Johnny, no creo que sea buena idea que éste aquí.-Dije frente a la puerta.

-¿Crees que me importa? Tienes cosas aquí, básicamente vives conmigo.-Dijo, tomó mi mano y entramos.

Al entrar sus padres estaban en el comedor, Johnny tomó mis caderas mientras me dirigía a su habitación.

-Lindo golpe.-Le dijo a su padre mientras pasábamos. Al llegar a su cuarto, empecé a juntar mis cosas.

-Eres un idiota Johnny.

-Tal vez un poco Tn. ¿Merezco un premio por eso?.-Dijo acercándose a mi.

-No lo creo.

-Anda linda, sabes que sí.-Dijo, tomó mis dos manos con una y las puso arriba de mi cabeza mientras me pegaba a una pared.-¿O no lo sabes?

No respondí, en cambio solo miraba sus labios. Él con su otra mano tomó mi pierna y me besó. Empezó a dar caricias en mi pierna y también a subir la mano. Yo no podía safarme de su agarre, cosa que él aprovecho para meter su mano en mis pechos. Casi apunto de sacarme la blusa, unos golpes en la puerta lo detuvieron.

-Carajo.-Maldijo en voz baja.

.
.
.
.
.
.
.
.
.
>
<