Contra Llamas 2ª Parte

Capítulo 32

Cuando la familia Luthor Zor-El se encontraba en frente de la escuela, las madres se despidieron cariñosamente de su pequeño como era costumbre. Tal como era de esperarse dos guardaespaldas más acompañarían a Josh, de por sí, solo era el fornido quien cuidaba de Samael y su otro compañero quien se encargaba de conducir.

Mientras la rubia le daba sus últimos besos a su pequeño, miró fijamente a los dos guardaespaldas que esperaban atentos al costado de la puerta por donde saldría Samael, y Josh que estaba un poco más adelantado miraba a los alrededores.

- Hazle caso a Josh en todo, ¿de acuerdo?- Le dijo la ojiverde a su hijo quien se separaba de su rubia madre.

- De acuerdo, mamá.

- Adiós mi tesoro.

- Adiós, mamá. Chao, mami.

- Hasta luego, bomberito.

El pequeño bajó con cuidado y después se acomodó la mochila antes de caminar. Ambas mujeres lo veían con amor y con preocupación. Antes de llevarlo a la escuela, solicitaron permiso a la directora haciendo los trámites por vía web, ya que cada guardaespaldas era registrado y llevaban un carnet de autorización que era controlada todos los días.

Kara miró a la dirección contraria de la escuela mientras que Lena seguía viendo a su pequeño caminar hacia la entrada. Frunció el ceño pero luego se relajó, suspiró y tomó la mano de la ojiverde dejando un beso en él.

- Va a estar bien mi amor.

- Ya podemos irnos.- Dijo Lena al chofer luego miró a su esposa.- Siempre voy a estar preocupada por él.

- Lo sé. Me pasa igual.

- ¿Qué harás en todo este tiempo libre que te queda?- Preguntó Lena y Kara le sonrió de lado.

- Si no te molesta quiero recorrer el edificio de tu empresa.

- De nuestra empresa.- Le corrigió Lena.

- Bueno, de nuestra empresa. Hace tiempo que no voy y quiero ver las renovaciones que me comentaste.

- De acuerdo, cariño.- La ojiverde le dejó un corto beso en los labios.

Solo los empleados más cercanos a Lena sabían que Kara era su esposa, los demás desconocían a la rubia. La habían visto varias veces pero como la rubia llevaba su uniforme de bombero siempre que iba, asimilaban que iba por cuestiones laborales con la ojiverde ya que esta apoya a los bomberos con recursos.

Si antes robaba miradas con su traje ajustado y su porte elegante y sin dejarse ver el rostro al menos no por completo ya que iba algo agachada y con el gorro puesto, ahora que llevaba un jeans negro algo ajustado, tenis blanco a igual que su playera, un saco de color beige, teniendo su cabello rubio suelto, dejaba a muchas personas atontadas viéndola pasar con la mismísima Lena Luthor tomándola de la mano.

Ignoraron el murmullo que se generó mientras se dirigían al ascensor exclusivo de Lena.

Una vez que entraron con un guardaespaldas, no impidió que la ojiverde dijera lo siguiente...

- Recuerda que tengo cámaras de seguridad con audio incluído, Kara.

La rubia sonrió de lado y dio un leve apretón a su esposa.

- Descuida mi amor, no quiero que por malos entendidos despidas a tus empleados.

La ojiverde la fulminó con la mirada y quiso deshacer su agarre pero la rubia se lo impidió.

- Suéltame, Kara.

- En serio mi amor, me preocupa que nuestra hija perciba tu mal humor.- Dijo bromeando.- Si una chica se me acerca, le haré así.- Alzó su mano libre donde llevaba el anillo y extendió frente al rostro de su mujer quien trataba de no sonreír pero le fue imposible al ver el rostro de su mujer tratando de alzar una ceja pero no le salía y terminaba alzando las dos, ocasionando la risa de la ojiverde.