-"Atsumu es el omega perfecto, dicen que tuvo bastantes parejas alfas gracias a lo guapo que es".
Miya Atsumu sabe la cruda realidad detrás de estas palabras, a pesar de ser el omega ideal en una relación, tiene cero exparejas incluso en el amor gra...
Yo y Kiyoomi no nos hemos encontrado desde lo sucedido, exactamente 6 años.
En ese lapso pude recuperarme de la depresión en la que estaba, también me di cuenta de mis acciones precipitadas pasadas, pero era demasiado tarde.
Yo ya estaba graduado de la escuela, tenía cosas más importantes que resolver como qué voy a estudiar o trabajar, era mi futuro.
A mi me encantaba y apasionaba el jugar voleibol, así que decidí ser jugador profesional.
Bueno... aunque no lo crea aún, estudie para ser entrenador por el hecho que cuando se retire del voleibol tendrá que arreglarse solo sin ninguna ayuda. Osamu me apoyo en mi decisión y en el proceso también.
¿Por qué estudiar Licenciatura o Grado en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte ?
Osamu me sugirió esa carrera desde que le conté lo que tenía planeado porque aunque termine de jugar voley siempre le va gustar ese deporte y qué mejor manera expresándolo enseñando a otros.
Si bien ahora a la vida me sonríe, llegará el momento que todo eso se acabaría y yo debo estar preparado.
Pero de momento disfrutaría su vida al extremo.
Mañana era el día que me uniría a los Black Jackals, después de recibir el mensaje que me habían aceptado como nuevo integrante y que podía empezar en la nueva temporada. Esto me emocionó bastante que empeze a saltar de alegría.
Mi vida mejoraba y eso me calmaba hasta ahora...
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Quien diria que a mis 23 años estoy queriendo dormir como oso en primavera en mi asiento rodeado de personas importantes.
Había llegado el gran día, yo no pude dormir anoche por la emoción que tenía en ese momento y solo pude dormir una hora antes que suene mi alarma para despertarme.
Yo quería dormir pero en medio del aviso del entrenador dando un discurso motivador para nosotros, los nuevos.
Solo quedaría en vergüenza frente de todos.
Me quedaría firme aún teniendo mis ojos queriéndose cerrarse, no debo caer en la tentación.
- Bueno, ahora vamos a presentar a nuestros nuevos integrantes - dijo el entrenador Foster
Estaba llamando en dos gracias al pequeño espacio que era el escenario donde estaban.
Realmente no estaba dándole la importancia a los nombres de sus compañeros por el sueño hasta que me di cuenta que yo era el último o eso pensaba...
- Miya Atsumu, setter y por último, Sakusa Kiyoomi, beteador externo- nos presentó Foster frente a todos
Me levante sonriendo aunque por dentro me estaba muriendo.
¿Kiyoomi estaba aquí?
No miré a ningún lugar a menos que sea al frente.
Ya no tenía sueño por lo asustado que estaba, mi mente dejaba de funcionar hasta que una voz interrumpió mis pensamientos.
- Bueno eso fue todo por hoy, tenemos que tallar nuestras nuevas armas lo máximo posible para el próximo partido - se despidió el entrenador del público
El entrenador nos guió a la cancha donde sería nuestros futuros entrenamientos y partidos de práctica.
No sentí ninguna mirada en ningún instante, ¿eso era algo bueno o malo?
Foster quería ver nuestras habilidades para formar el equipo titular, algo apresurado fue la idea ya que se aproximaba los partidos oficiales.
Así que formó dos equipos para enfrentarnos entre nosotros.
Dejando todo el asunto anterior disfrutó cada momento el partido, cada jugador daba lo mejor de sí y él no era la excepción.
Aunque si vió que Kiyoomi era su contrincante osea estaba en el otro equipo.
Querer ignorarlo no algo fácil, sus remates y recepciones perfectas dejaban a todos estupefactos. Pero también la atención se lo llevaba Bokuto Koutaro, Hinata Shoyo y obviamente él.
Por un momento en su vida admiró a Kiyoomi de una manera no amorosa sino como una amistosa.
- Es suficiente - dijo Foster - Vallanse a cambiar para irse a sus casa y prepárense para el día siguiente que les dire los resultados, pero antes que se vallan tomen sus casacas del equipo como una bienvenida -
A cada uno se les dió la prenda y algunos emocionados ya se estaban poniendo, pero menos él.
Exhausto era muy poco para describir el cansancio que él sufría, más si todo el lugar estaba de feromonas que lo ahogaban por completo.
Él se fue rápidamente a las duchas, ya no soportaba estar un minuto más en el sofocante calor del ambiente; después de eso se cambió de su ropa con la que traía en su mochila.
Su cabello aún estaba mojado pero no le dio importancia; sin embargo para una persona sí.
Al momento que estaba apunto de irse una toalla fue hacía su cabeza, al querer reclamar a la persona se llevó una sorpresa no tan sorpresa.
- Omi... - susurré sorprendido
Frente a mí estaba Kiyoomi con una toalla en la cabeza frunciendo el ceño, era algo incómodo hablarnos para los dos desde mi partida.
- Para ti es Sakusa, Miya - dijo frío
Él estaba en camino a la salida,pero yo quería hablarle y explicarle todo. Sin embargo, el resentimiento abarcaba en mí, antes de darme cuenta estaba apoyado en el hombro de Kiyoomi llorando.
- Omi yo... no quería hacerte esto - hablé con mi voz rota
Era la verdad que tan solo sabía yo.
La vida nos puede juntar con personas de la manera más hermosa, pero cuando las separa lo hace de la peor manera, torturar las almas hasta dejarlas con marcas que solo se remediara con el paso del tiempo.
Pero a nosotros el tiempo no nos ayudó en nada...
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