27.-¿Qué somos qué?

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Un inexplicable "dolor" estaba recorriendo su cuerpo haciendo que me pusiera débil, pero seguía mis lagrimas no paraban de brotar de mis ojos.

Por lo que veía Omi estaba en la misma situación que yo.

¿Qué sucedía? ¿Qué era este "dolor"?

Nuestras feromonas aumentaban a mal en peor, ya podía sentir más las feromonas de Omi y eso hacía que me pusiera más débil.

- Debemos de dejar sacar feromonas para volver a la normalidad - sugirió Omi

- Claro, por que no se me ocurrió antes - dije sarcástico

La mala mirada me gané de Omi, pero era la verdad.

Si uno empezaba a expulsar feromonas, sin un control alguno el otro votaba como respuesta. Pero esto solo sucedía cuando uno de los dos está en ciclo de celo y ninguno de los estaba en esa condición.

Me sobresalte al pensar eso y miré a Omi, él estaba sufriendo para no caer encima de mí y sus brazos temblaban por eso.

- Omi... ¿Cuándo tuviste tu celo? - pregunté

Él me miró sorprendido ante mi pregunta.

- Hace dos semanas - respondió con su voz ronca

Me alivié al saber eso.

Yo lo tuve hace una semana, así que ambos no estábamos en nuestro ciclo.

Pero entonces...

¿Por qué sufrían esto?

El recuerdo de esa noche vinó a mi mente, solo sacudí mi cabeza ante esa idea, aún así era una posibilidad que esto sería igual a ese día.

Dirigí mi mirada a los alrededores buscando a alguien, sin embargo todo estaba desolado, o eso era lo que creía.

Sentí un peso en mi cuerpo de repente que hizo que gimiera alto, Omi había caído sobre mí.

Quise tapar mi boca, pero ya no podía mover mi cuerpo.

Omi con su último esfuerzo movió su cabeza para mirarme con su cara roja.

Estábamos inmóviles.

El "dolor" que sentía antes, se convirtió en un calor sofocante.

Sus respiraciones eran entrecortadas.

Sus vistas estaban nubladas.

¿Qué más seguía?

- Oigan, ¿Qué están haciendo? -

Una voz invadió todo el lugar.

Cuando levanté la vista me encontré con un chico de cabello bicolor mirándonos confundido y a un chico peliazul que realmente no sabía describirlo.

Eso ya no importaba.

- ¿Podrías ayudarnos? - dijo Omi

De ahí ya no puedo hablar más porque una vez más me desmayé.

De ahí ya no puedo hablar más porque una vez más me desmayé

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-Nuestro amor es complicado-SakuatsuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora