Decir te Amo (Sebastián Michaelis) Temporada 2

Capitulo 11: El primer caso

Narra Katherine:

Cuando Sebastián esta deseoso ahí que dejarlo pensaba internamente, lentamente abrí los ojos, sintiendo el sol en mi pálida piel, estirándome un poco note que no estaba, se habrá levantado temprano como siempre, el ruido de la puerta me alerto.

"Buenos días mi princesa".-Dijo Sebastián alegremente con una bandeja en sus manos.

Sebastián me traía el desayuno, que bonito.

"jeje buenos días Seby ¿Qué traes ahí?".-Pregunte intrigada.

"Un desayuno especial para una dama especial".-Dijo sonriente poniendo la bandeja sobre mi, y después me dio un beso en la frente.

"Que bonito todo Sebas gracias".-Respondí alegremente y lo abrase, el me correspondió el abrazo.

"Disfrútalo mi princesa".-Dijo acariciando mi cabeza y se sentó en la cama.

Había hecho mis comidas favoritas humanas, con un ingrediente extra, probaba cada bocado muy feliz, siempre disfrute de sus comidas, llegue a notar que Sebastián me miraba muy feliz como un niño. Agarre la taza del te, lo probé y sabia distinto.

"¿Paso algo amor?".-Pregunto preocupado.

"El te sabe distinto".-Dije suspicaz.

Al decir eso, Sebastián soltó una risa.

"No es el te humano que acostumbras, es de sangre".-Dijo sonriente.

"Con razón, pero sigue siendo delicioso".-Respondí tomando otro sorbo.

"Hace tiempo que no bebes sangre, no quiero que te debilites".-Dijo preocupado.

Es cierto, desde que llegue no me alimente bien, no me gustaría que los otros vampiros me vean débil.

"¿Lo hiciste con los frascos de sangre que ahí mi maleta verdad?".-Pregunte soltando una sonrisa.

"No se te escapa nada querida".-Respondió con una breve sonrisa.

Acto seguido, tomo la bandeja y la dejo en la mesa de café que estaba cerca y se sentó conmigo en la cama.

"Si me quedara sin sangre...tendría que cazar".-Murmure.

El escucho mi murmullo y me abrazo.

"Tranquila, yo te traeré humanos para que te alimentes".-Dijo dándome un beso en la frente.

"Es lo que siempre haces, yo me quedo con su sangre y tu con su alma".-Respondí mirándolo a los ojos con una sonrisa.

"La combinación perfecta".-Dijo abrazándome mas fuerte.

Ambos reímos, la mañana estaba empezando bien, pero lo que había pasado hace unos días todavía me atormenta, quitando mi sonrisa, Sebastián se percato.

"¿Algo te atormenta mi amor?".-Pregunto preocupado.

Lo mire triste.

"Tuve una situación peculiar cuando fui a pasear sola hace unos días".-Dije mirándolo a los ojos.

Sebastián abrió los ojos sorprendido, pasando a una cara de enojo.

"¿Alguien te lastimo?".-Pregunto serio.

"No no, no paso eso exactamente".-Dije tratando de tranquilizarlo.

Empecé a contarle todo lo que paso ese día, lo del niño perdido, lo del delincuente, la sensación rara que tuve y mi encuentro con Daisy, y mi preocupación por ese día en concreto.

"¿Salvaste a un niño? ya veo".-Dijo llevándose la mano al mentón.

"Sebas siento algo de culpa por ese día".-Respondí apenada.