Chismes (Sasuhina)

Capítulo 28

Hinata se había enamorado a primera vista, no, no de Sasuke. Había pasado una semana desde que Naruto se alojaba en su casa, y lo dos repartían el trabajo en casa, cosa que le venía bien a la chica porque el tiempo que antes invertía en limpiar, ahora lo aprovechaba en tomar un paseo por su tranquila aldea. En el momento en el que Hinata pasó por delante de un escaparate sus ojos se posaron en un sofá de color lavanda con detalles en blanco, su corazón latió fuertemente, recordó su sofá, un dos plazas de color verde el cual tenía manchas que ya no se podían quitar por el tiempo que había pasado. Miró el precio rezando por que fuese asequible, no lo era. 

El dinero de su cuenta se estaba acabando, si compraba el mueble, no tendría para pagar la renta de su apartamento, ella lo sabía. Miró por todo el escaparate buscando alternativas más baratas de aquel sofá que tanto le había cautivado, su mirada se detuvo en un cartel, buscaban un empleado en la tienda.

Entró apresurada, aunque no era mucho de caprichos, Hinata también se permitía sus lujos. Los ojos del dependiente fueron directamente a su pecho. 

"Wow" La Hyuga se cubrió incomoda.

"¿Sabe usted que soy menor?"

El señor de pelo largo y cano volvió la mirada rápidamente hacia sus ojos.

"Disculpa chica." Rascó su nuca incomodo y arrepentido. "¿Qué te trae por aquí?"

"Quería solicitar el puesto de empleado."

"Mmmm..." El señor la miró de arriba a bajo. "Contratada, empiezas mañana."

"Pero si no me ha preguntado nada."

"Mira chica, llevo muchos años y se reconocer a una buena empleada como tú." La boca del dependiente se tornó en una gran sonrisa. "Adivino que tu horario disponible es de tarde, excepto los sábados, como hoy que puedes de mañana."

Hinata asintió y el dependiente se giró dirigiéndose a lo que parecía el trastero de la tienda, cuando volvió traía un paquete en sus manos.

"Este es el uniforme, trae tres mudas, ya sabes, para no usar toda la semana la misma."

La chica agarró el paquete con una mirada curiosa.

"¿Tienes uniforme de todas las tallas por si viene un nuevo empleado?"

"Obviamente no, de hombre no tengo ninguno." El hombre agarró unas llaves de debajo de su mesa y se las entregó. "La tienda abré de nueve de la mañana a una y media de la tarde, y de cuatro de la tarde a ocho y media de la tarde." Hinata apuntaba todo en el bloc de notas de su celular. "Necesito saber tu nombre para hacer una placa identificativa."

"Me llamo Hinata Hyuga."

"Bienvenida a tu nuevo trabajo Hinata, yo soy Jiraiya, tu jefe."