_ Entoces, que piensas de todo esto?_ pregunté expectante con los codos apoyados en las rodillas y mirando a Jaramillo, que estaba cruzado de piernas frente a mí.
_ Poché esto que me cunetas es grave. Estas segura que es el mismo tipo que te atacó?
_ Te lo juro Juan, es el mismo, el que trabaja para un cartel.
_ Qué tienes tu que ver con un cartel?
_ Esa parte es la que no entiendo. Yo jamás he tenido nada que ver con algo ilícito, menos un cartel. Ni siquiera creo tener enemigos. Por un momento pensé que podría ser alguien que no está contento con mi relación con Daniela.
_ Eso tiene sentido, es obvio por la amenaza_ opinó Jaramillo y asentí.
_ Pero sus padres no pueden ser porque ellos no saben aún, y tampoco los creo capaces de algo como eso...
_ Y la familia de su prometido?
_ Ex- prometido_ aclaré.
_ Eso mismo...
_ Bueno ellos también son gente que maneja mucho dinero, de echo, el papá de Daniela tiene negocios con el padre de Richard. La verdad no los considero como una amenaza_ dije segura.
Jaramillo se quedó pensativo y yo lo miraba atenta.
_ Hay cosas que no me cuadran aquí, pero quien quiera que aya sido, lo encontraremos y pagara. Yo te ayudaré mi vieja amiga_ me sonrió y asentí con satisfacción.
_ Gracias amigo, gustas un café?
_ Claro, pero tu puedes? Estas con esa herida...
_ Estoy herida no invalida_ le sonreí y me levanté para ir a la cocina. Yo ya me sentía mucho mejor, casi no tenía nada.
Preparé dos tasas de café y volví al salón donde Jaramillo hacía una llamada por cámara, en la puerta corrediza que daba a un lateral de la casa. En la noche las luces del jardín alumbraban de colores llamativos, se podía programar y me gustaba mucho verlo. Juan me hizo una señal para que esperarse y me senté en el sitio que había ocupado anteriormente, en el sofá. Pronto Jaramillo terminó y se acercó.
_ Poché acabo de hablar con el fiscal que sigue el caso de Marqués, tengo una entrevista con el para mañana.
_ Y eso que quiere decir?
_ Que él me dará información y quizás pueda hacerme con un permiso para visitar a Marqués en prisión. Necesito tiempo para hacer todo esto y recopilar información.
_ Claro ya sabía, por mi te dijera que no me apura pero te mentiría. Necesito saber quien está detrás de esto porque temo por Daniela. Sabes que me muero si le llega a pasar algo.
_ Lo sé amiga, por eso voy a intentar apurarme con todo. Nunca he tenido la oportunidad de conocer a Calle, pero se cuánto se quieren. Me gusta que tus ojos brillen cuando hablas de ella.
Platicamos un buen rato, casi una hora. Luego Jaramillo se fue diciéndome que me mantendría informada y yo me dispuse a ir a la cocina. Busqué la medicación que había dejado Daniela en un pequeño platillo al lado del bucaro que tenía en la mesa, luego un vaso de agua y primero me tomé la pastilla rosa, para después seguir con la blanca, que era de forma circular y más grande.
Me sabía a mierda tener que tomar la medicación, pero tenía que hacerlo.
Cuando comencé a buscar en el refri el almuerzo que había dejado mi novia, la puerta se abrió y asomé la cabeza viéndola entra con una sonrisa y algunas compras enganchadas al brazo.
