Nuestro universo

La llegada medieval

Era de tarde y la clase 1A estaba esperando en la sala común el regreso de sus demás compañeros, aquéllos que casi mueren en manos de un villano.

Momo: cuanto creen que tarden en llegar?

Uraraca: es cierto ya pronto anochecera

Lida: les suplico que se mantengan clamados y conserven la paciencia por favor, debemos confiar en los doctores y en el Sensei que todo saldrá bien.

Pero para muchos eso no era fácil, estaban preocupados, y si ellos estaban así no se imaginaban como estarían sus padres, porque según el Director Nezu les había informado era que los padres de aquellos estudiantes se encontraban en el hospital, tal vez sentían más que miedo en estos momentos, pues ninguna madre o padre soportaría la idea de perder un hijo.

En eso se abre la puerta, dejando ver a la otra mitad de la clase y su profesor. Los demás al verlos no pudieron gritar, saltar o abrazarlos por lo aliviado que se sentían al ver que estaban bien.

Momo: es bueno verlos devuelta chicos.

Lida: ¿se sienten bien? ¿nececitan algo?

Deku: estamos bien no se preocupen.

Denki: sí, aunque un poco a doloridos pero seguimos vivos.

Aizawa: recuerden no hagan tanto esfuerzo y procuren descansar que mañana hay clases.

Kirishima: no ahí problema, veredas Bakubro?

El musulmán desapareció.

Sero: creo que él ya se nos adelanto jeje

Deku: (espero que Kacchan se encuentre bien)

Es así que entre los pasillos de los dormitorio podemos ver/leer un peli cenizo caminar por ahí con la mirada perdida asta llegar a su cuarto y echarse a dormir, más rápido de lo que se imaginan.

Pov Katsuki:

Podía jurar que estaba en los dormitorio pero por razones desconocidas me encontraba en un parque y de día, lo curioso era que aquel parque era el que frecuentábamos Deku y yo cuando eramos niños. En eso escucho risas me volteo y ahí estábamos, él y yo de niños , jugando hacer héroes, siendo yo quien mandaba y el nerd quien me seguía.

- Kacchan es increíble -, decía Deku mientras veía con esos ojos llenos de luz como yo usaba mi don.

- ya lo se Deku, no molestes -, le grite, luego lo empujo y huyo de ahí. Dejándolo completamente sólo y llorando en el suelo.

En ese momento sentí una presión en mi pecho, con solo verlo ahí tirado y llorando me daba tantas ganas de abrazarlo, consolarlo, alegrarlo. No se porque, pero quería ver su hermosa sonrisa, queria verlo feliz y sobre todo no queria ser la causa por la que lloraba.

Me incline asta su altura para poderle hablar y si es posible consolar, pero cuando me vio aquellos ojos que antes me veían con tanta pasión ahora reflejaban miedo, miedo hacia mi. Y eso hizo que mi pecho se estrujara más.

No se como pero de un momento a otro ya no esta enfrente del Deku pequeño sino con el Deku de la preparatoria, estaba en suelo todo golpeado, ensangrentado, algo quemado y con la mirada en el suelo. Me mire las manos y note que estaban llenas de sangre. La sangre de Deku.

- Deku-, quise tocarlo pero él de un manotazo me lo impidió, se paro, levanto la cabeza y esta vez tanto su cara como sus ojos reflejaban 100% odio.

- TE ODIO KATSUKI BAKUGO -, me grito a todo pulmón y salio corriendo de ahí, mi cuerpo se paralizo cuando escuche esas palabras. Una fuerte brisa me golpeo dejándome en completa oscuridad. En eso un montón de espejos aparecen a mi alrededor mostrándome todos los momentos donde lo hice sufrir. Tanto mi corazón como mi cabeza dolían al recordar todo eso. Intente escapar de ahí pero todo eso parecía un laberinto asta que a lo lejos pude ver una puerta, sin embargo solo termine en la azotea de la escuela y al frente esta Deku al borde del abismo.