Capítulo 2

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"¿Ahora qué hacemos?"

Ya pasaron varias horas desde que entraron a ese salón con la esperanza de que lo que vieron solo haya sido una ilusión suya. ¿Zombies? Sería muy tonto pensar que lo eran, eso solo pasaba en las películas e historias.

Nadie sabía qué hacer, uno de ellos llegó a pensar que debían volver a clases como si nada hubiera pasado, otro pensaba que deberían de quedarse ahí hasta que les dieran un anuncio sobre lo que acababa de pasar.

—¿Creen que debamos volver? —Preguntó Roier.

—¿Acaso no viste lo que pasó? Esa cosa nos va a matar si volvemos, es mejor quedarnos aquí. —Respondió Rivers mientras se tronaba los dedos angustiada.

¿Qué mierda era lo que estaba pasando? ¿A qué nos estamos enfrentando? ¿Un apocalipsis zombie? ¿Por qué ahora?

Eran demasiadas preguntas y pocas respuestas.

Cada uno estaba en su mundo, intentando pensar con claridad, hasta que escucharon gritos afuera del colegio.
Los chicos asomaron sus cabezas por la ventana, ahí entendieron todo.

Veían como todos corrían alborotados en el patio, como algunos eran lastimados o mordidos. Odiaban el hecho de tener que ser testigos de toda esa masacre.

Aldo se quitó de la ventana y se dirigió a la ventana que daba hacia el pasillo con el objetivo de ver si había alguien afuera, nadie. Abrió la puerta y salió del salón hacia las escaleras mientras todos lo observan atentamente.

—No hay nadie, tenemos que bajar. —indicó desde la puerta.

—¿De qué hablas? Sería muy peligroso si bajamos. —dijo Roier acercándose a Aldo.

—Está bien, no bajes, pero yo lo haré, tengo que buscar mi celular y llamar a alguien que nos ayude. ¿Quién me acompaña?

Nadie, nadie dijo nada.

Aldo, al ver que nadie decía absolutamente nada, decidió irse a buscar su celular, hasta que...

—Yo voy. —decidió Rivers.

—¿Segura? —cuestionó.

—Sí, no tengo nada que perder. —contestó por última vez.

Ambos salieron dirigiéndose a las escaleras, empezaron a bajar cuidadosamente sin provocar ningún ruido .

—¡Tuvimos que acompañarlos! ¿Y si les pasa algo? —gritaba Quackity.

—Alex, cálmate. Gritando no solucionas nada, era mejor quedarnos aquí. —contestó Ari aguantando las ganas de llorar. No había visto a su hermana hasta ahora y estaba preocupada, solo pensaba en buscarla.

—Hay que pensar en algo, en un plan o qué sé yo. Pero de que salimos todos, salimos todos.

Si supiera que no todos salieron.

Rivers y Aldo ya habían llegado a su salón de clases, Aldo se asomó a la ventana para ver si había alguien adentro.

—Mierda. —susurró.

—¿Qué pasó? ¿Hay zombies? —preguntó asustada.

—Sí, hay dos zombies. Debemos esquivarlos. —susurró nuevamente.

Sin dudarlo, entró. Como era de esperarse, los zombies se dirigían hacía él con una gran velocidad, Aldo empujó a uno de ellos y este cayó al suelo, fue rápidamente hacia su asiento para tomar su mochila y salir de ahí, pero el otro zombie se lanzó hacia él, este intentaba morderlo pero Aldo había puesto su mochila en la cara del zombie para que no lo mordiese.

No mires atrás | StreamersDonde viven las historias. Descúbrelo ahora