Cap. 26🧶

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09:00 p.m

Dos bonitos meses habían pasado, la pareja ya vivía de nuevo en su casa junto a su hermoso cachorro y desde entonces todo se volvió un completo caos.

El mes pasado llegaron los padres de ambos y Jisung no dejó que nadie entrará a su habitación y casi ataca a jessi por abrazar a Minho gruñendo y diciendo que tanto su cachorro como Minho ¡su alfa! Eran de él y nadie más debía poner sus manos sobre ellos.

Ahora ya con las cosas un poco más relajadas en el término de posesividad de su adorado minino, bueno... Estaban discutiendo el la sala mientras Jisung le daba de mamar a su bebé ya que Minho tuvo "dificultades" con la leche que el Omega había sacado de sus pechos con un aparato y había puesto en los biberones de Leegguk para que esté se alimentará mientras Jisung iba a darse un baño.

Cabe mencionar que a Jisung le salieron pechos para alimentar a su bebé mientras se alojaban en el hospital y desde entonces Minho se volvió loco.

Ha respetado completamente el hecho de que su minino acaba de dar a luz y no está listo aún para mantener intimidad, lo respeta, claro que sí, pero esto se le dificulta muchísimo cada vez que ve a su omega alimentando a su precioso bebé.

Cuánto desearía poder probar esa leche que su hijito tanto ama y sobre todo tener sus labios en esos pezones y alimentarse de ellos como si fuese un pequeño casi recién nacido.

Claro está que no le ha dicho a Jisung que quiere que lo amamante como a su cachorro, sería un poco raro.

¡Pero desde cuándo han sido normales ellos dos!

Así que aquí se encuentran, discutiendo por culpa de la gotita de leche que tenía que probar para saber si la leche se encontraba a una buena temperatura para el bebé. Él solo probó un poquito, y su alfa se descontroló.

Acabo con ambos biberones rápidamente y intento darle jugo de uva a Leegguk en lugar de la leche.

— ¡Cómo se te ocurre! — gruño el Omega mientras limpiaba el jugo que el bebé rechazo y mancho su ropita. — Minho, me fui quince minutos... ¡No puedo creer que te bebieras la leche del bebé!

—¡Lo siento! Pero él tenía ganas de un jug-

Jisung lo interrumpio tirándole un calcetín de su cachorro — él no toma jugo en lugar de su leche — el alfa bajo la cabeza avergonzado, Jisung estaba molesto por su culpa.

— lo siento mucho... Prometo cuidar mejor a nuestro cachorro. — susurro decaído, por supuesto que no quería que por su culpa algo malo le pasará a su bebé.

Jisung suavizó su rostro rápidamente, estaba siendo muy severo con su pulgoso, debía comprender que para ambos era nuevo esto de ser padres y que a veces ambos podían llegar a equivocarse.

Se acerco a su alfa y dejo un pequeño beso en sus labios — perdóname por gritarte.

— Y tu perdóname por no saber cuidar a Leegguk...

Jisung sonrió.

— Es trabajo de ambos, ya aprenderemos a hacerlo mejor poco a poco.

— También lamento beberme su leche, pero es que...— se sonrojo fuertemente mientras movía los labios intentando decir algo.

— ¿Quieres probar?— dijo el Omega directamente, él un poco avergonzado asintio y Jisung solo rio. — te dejare hacerlo pero primero dormiré a nuestro filetito es su hora de dormir si no queremos que se despierte de madrugada.

Y así mientras Jisung acostaba a su cachorrito, él preparo la cena y ambos cenaron juntos una vez el pequeño ya se había acostado, Minho tomo su celular un segundo mientras su minino se lavaba los dientes, su fondo de pantalla de su Omega y su bebé dormidos abrazados fue lo primero que vio y sonrió feliz.

Minino 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora