Tn corría lo más rápido que podía para que el dios del trueno no la alcanzara, miró atrás suyo para ver si se estaba acercando.
Ella y Loki se habían ido por caminos diferentes para que no sea fácil atraparlos.
De tanto mirar atrás no se dio cuenta que se acercaba a un barranco empinado de unos 4 metros de profundidad. Su pie se resbaló en la orilla del barranco haciendo que caiga y ruede hasta llegar el fondo.
Soltó unos quejidos de dolor y levantó la vista para ver que cayó por un barranco empinado, se levantó tambaleándose un poco y vio que su ropa estaba sucia y un poco rasgada, con sus manitas sacudió la tierra de su vestido.
Empezó a trapear por el barranco para salir pero terminó pisando mal haciendo que su pie se arrastre y cayera otra vez rodando hasta llegar al fondo. Una y otra y otra vez trataba de salir pero no lo lograba, pero no se iba a dar por vencida. Retrocedió unos pasos hacia atrás para luego empezar a correr y trepar con fuerza y lo más rápido que pudo hasta que logró salir.
Soltó un leve suspiro de cansancio y se recostó en el suelo con la respiración agitada.
Loki:¡Tn-Chan!
La pelirroja levantó un poco su cabeza y vio cómo el peliverde se acercaba a ella para agarrarla u abrazarla.
Loki:¡Oh mi querida cómplice!, ¡Pensé que Thor te había atrapado!
Tn:No, solo me caí por un barranco y logré salir
Loki: -suelta un silbido- Eres una niña fuerte, ¡Vamos a seguir haciendo bromas!
Tn:¡Si! -levanta los brazos emocionada-
Los dos bromistas empezaron a irse para dirigirse de nuevo a Asgard, pero lo que no sabían es que Thor los estaba viendo, él había visto todo y estaba sorprendido por la pequeña humana. Cualquier niña pequeña de su edad habría gritado por ayuda o hubiera llorado, pero Tn en lugar de hacer eso se las arreglo sola para salir del barranco sin ayuda.
Esa niña sin duda lo había impresionado.
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Tn como siempre se había escapado del palacio de su madre, estaba en el bosque con una canasta y frente a un manzano, iba a visitar de nuevo a los dioses y quería darles como siempre tributo por respeto a ellos.
Trató de trepar el árbol pero por culpa de su vestido y sus zapatos terminaba resbalándose y cayendo, estiró sus bracitos intentando alcanzar una de las ramas pero era inútil.
Hasta que sintió unas fuertes y enormes manos agarrarla y levantarla para alcanzar las manzanas, giró su cabeza para mirar hacia abajo y vio a un hombre muy grande y musculoso con cabello rojizo anaranjado y ojos azules, este la miraba con una sonrisa.
XXX:¿Necesitabas ayuda pequeña?
Tn:¿Eh?, ¡Si!, gracias señor
La pelirroja tomó todas las manzanas que pudo alcanzar y las dejó caer en la canasta, al ver que estaba llena Tn le pide al ojiazul que la bajara. Se acercó a la canasta para tomarla, pero como tenía muchas manzanas y estas eran enormes pesaban mucho que tenía que arrastrar la canasta.
