Porque hay almas que son como casas
pequeñas y repletas de cosas que ya hemos visto
sillones, alfombras, camas y mesas
nada por lo que soltar un suspiro.
Pero hay almas que son incluso más insignificantes
como una esquina confinada de una habitación
con tan pocas ideas interesantes
que conociéndola y entendiéndola tardamos una sola estación.
Porque hay almas así; vacías
sin mucho que decir
con nada que enloquezca
Hay almas que aburren, que hastían
Almas que se pueden predecir
Almas con una aberrante simpleza.
Tan en contraste con las almas eternamente tediosas
existen almas como universos
Almas que nunca terminas de conocer
Almas infinitamente misteriosas
Espíritus que convierten nuestros días eternos
en eternas aventuras para intentar comprender
cada parte de su magnífico ser.
Porque hay almas así; infinitas
En cada idea o pensamiento un misterio
y una maravilla en cada rincón y recoveco
Hay almas que excitan, que avivan
Almas que son conocimiento
Almas con un enloquecedor encantamiento.
Porque hay almas que llevan a la par el secreto de la felicidad
El secreto de cómo pasar toda tu vida
alejado de la hartante monotonía
de una vida junto a un alma que no es más grande que una ciudad.
