Hua Cheng es un nadador profesional y mucho más, ya aburrido de esa vida decide darse un tiempo alejado del agua y la fama volviendo a su ciudad natal, pero empieza a tener sueños extraños con una estatua debajo del agua, un día, nuevamente aburrido...
Hace mucho tiempo, mientras aun existía en los corazones de muchos, visitaba a mis creyentes en algunos templos, pero mi mala fama llego y dejé de ser conocido, sin embargo, siempre tuve un devoto creyente, ese pequeño niño, el ultimo creyente que vi, para luego quedar atrapado en esta piel de cemento, una maldición que aun no comprendo.
Pasé mucho tiempo así, no podía ver nada a mi alrededor, mis ojos estaban cerrados, pero podía sentir el agua rodeándome, al igual que algunos peces, muchas veces pedí prestada la vista de algunos de ellos, muy pocos aceptaban, la mayoría me rechazaba, no sabía dónde estaba, en qué lugar del mundo estaba petrificado, tampoco sabía cuánto tiempo he pasado así, pero he logrado meditar todo este tiempo.
Como cualquier día en vida de hoy en día, paso algo sumamente extraño, mi alma se conectó con otra alma que vagaba en busca de algo, no sabía de quien se trataba, pero podía seguir mi escapatoria a esto, no dude en pedirle ayuda, pero por lo visto solo le hice creer que estaba loco, lo intente algunas veces, pero obtuve avances, justo sobre mí, a unos cuantos metros, las agua se movían, era puro alboroto ahí arriba, pero logre sentir una energía familiar.
-Ayúdame-Trataba conectar mi energía con la de él, tratando que llegara a mí, pero muchas veces no lo lograba, al escuchar esas personas sobre mí, sin dudarlo lo intente, pues bien, podría ser él...-Cerca, estoy cerca -Creo que debí ser más específico...de igual manera no sé si me escucho.
Le pedí ayuda a unos peces, sin embargo, no tuve respuesta, hasta de la nada logre ver nuevamente, por lo visto era un pez koi, nade hasta llegar a la superficie, pero detrás de mi venían muchos peces, intente muchas veces alejarme, pero sin importar que, aquel pez koi, de un fuerte color rojo y pequeñas manchas negras, me seguía.
Al llegar a las orillas de lo que parecía un lago, sentía una mirada sobre mí, parece muy joven y cuando sentí su mirada sobre mí no pude evitar tratar de ocultarme debajo de algunos lotos que estaban cerca, ¿se dio cuenta? ¿no logro imitar un pez apropiadamente? Al final de todo no se percató de que no ella un pez extraño, sin darme cuenta el pez se cansó y mi vista oscura volvió.
Muy poco tiempo paso, sentí que su alma estaba demasiado cerca, quería gritar por ayuda "Estoy justo aquí" pero no lo lograba, nunca había sentido palpitar tanto mi corazón, pero el tacto de su mano en mi cara era real, no era un sueño, estaba justo aquí, conmigo, pero sigo sin poder decirle que en verdad soy yo, no sé si reír o llorar...su energía se fue rápidamente.
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Paso mucho tiempo, nuevamente ese pez me ayudo, pero por alguna razón nadaba en círculos, al parecer lo hacía sobre se suponía que estoy, es muy extraño, pero se vio espantado por un fuerte golpe en las aguas, sumergiéndose rápidamente para evitar ser lastimado, no logre ver mucho, solo un destello rojo que se sumergía poco a poco, para así volver a la oscuridad de siempre...pero paso algo que jamás imagine.
La dureza de mi cuerpo empezó a desaparecer, sentido más libertad, sintiendo como mi piel se humedecía por el agua, el pesor de la ropa mojada, como lograba ver de nuevo poco a poco, como... ¡¿Qué hace?! En un intento brusco de apartarme termine soltado mucho aire, esta vez sí puedo ahogarme, pero sentí un agarre por mi cintura que empezó llevarme hacia la superficie, que al llegar las bocanadas de aire se mezclaban con tos. ¿Qué ha pasado?
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-Déjame entender-Yin Yu estaba caminando de un lado a otro frente a la televisión, mientras Yizhen, He Xuan y... ¿Shi Quingxuan? Estaban sentados en el sofá viéndolo- Tres días después de irnos de su casa volvió a esa laguna, donde conoció a alguien, ha pasado una semana desde ese entonces, tiempo donde según nos explicas-Dijo mirando a Quingxuan- ellos parecen mucho más que amigos, así sin más-
-Se que suena raro, pero es la verdad, mi hermano y yo estábamos aun en ese pueblo, sin querer nos topamos con él y su acompañante, quien es muy amable, por cierto-
-Él no es de los tipos que se pueda conseguir a alguien de un día para otro, de hecho, nadie nunca supo si le llego a gustar alguien-
- ¿No es mejor si se le pregunta directamente que estar haciendo especulaciones? -Recomendó Yizhen.
-Tiene razón, es mejor preguntarle a él, ¿no? –
-Adelante inténtalo-Le respondió He Xuan a Quingxuan mientras se burlaba.
-Es mejor preguntar que malinterpretar-Quingxuan decidido tomo prestado el teléfono de Yin Yu, para poco tiempo después darse cuenta que alguien tenía razón, de hecho, no contesto...
-Se los dije-
- ¿Entonces iremos otra vez? –
-No hay de otra-
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Mucho antes de ser una estatua fui un príncipe, un dios y muchos más, pasaron muchas cosas en mi vida que un día no bastara para contarlo, muchas cosas marcaron mi vida con el paso del tiempo, recuerdos que me atormentan, heridas que sanaron, pero no mentalmente, pero, algo las sano, algo me hizo cambiar, algo me hizo ser alguien nuevo...alguien me amo a pesar de todo.
Mientras te esperaba nuevamente pasaron muchas cosas, una de ellas que termine como una estatua, me pregunto cuanto tiempo me buscaste, ¿fue tanto que te aburriste de buscar? No, jamás te rendirías tan fácilmente, mi corazón siempre confió en volverte a ver, pero tal vez de tantas vidas que hayas pasado ya no lo recuerdes del todo bien.
Por fin te encontré, nos volvimos a ver, tu con esa perla, yo con ese anillo, ¿aún me recuerdas? San Lang...
