CAPÍTULO 3: Un deseo

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-¡OH M!€#&@!, olvidé que no tengo cómo entrar – Gritó la arlequín mientras poco a poco la consumía la desesperación. -Ahora no tengo cómo decirle a no ser que se aparezca ese ¡$@#% por aquí otra vez... Bueno, supongo que me quedaré en frente de la puerta esperando una señal. – Pensó Pomni para proceder a sentarse en frente de la puerta.

El tiempo pasó muy lentamente y no habían señales de Jax, aún así Pomni no se iba a rendir y se quedó esperando sentada por minutos, minutos que se convirtieron en horas, hasta que el tiempo se fue lo suficiente para que fuera la hora del almuerzo.

Kinger salía de su habitación, la cual estaba muy cerca al cuarto de Jax, mientras se dirigía a la zona de comidas, se encontró a la arlequín ahí tirada y se acercó lentamente.

-¿Estás bien? Te noto cansada – Dijo el rey mientras le daba toques a Pomni en el hombro para despertarla.

Pomni hizo un movimiento brusco para proceder a estirarse, aunque este movimiento repentino asustó a Kinger y lo hizo brincar de un susto.

-Ah, hola Kinger, está... ¿todo bien? – Dijo la arlequín.

-Claro, pero tú... ¿Qué haces ahí?. Mencionó Kinger

-Estoy plantando una bomba, no ves? Decía Pomni en un tono sarcástico.

-¿De dónde sacaste una bomba? – Respondía Kinger con un tono de asombro y preocupación.

-Era una broma, genio... suspiro De todas formas, solo estoy buscando a Jax, no... ¿Lo habrás visto? – Preguntaba Pomni empezando a desesperarse lentamente.

-Dijo que iba para... ¡AAAHH!- Gritó aquél rey seguido de un brinco por el susto.

Justo cuando Kinger le iba a decir a Pomni, esta se vio teletransportada hasta la zona central del circo, un escenario amplio y colorido donde ya había estado familiarizada por ser donde ocurrieron aquellos eventos en su primer día. Uno a uno los integrantes del circo fueron apareciendo en aquel escenario, sin saber qué estaba ocurriendo realmente pero ya se hacían la idea de quién era el autor intelectual de esta innecesaria ocurrencia: Caine.

-¡Hola amigos digitales! – Decía Caine mientras sacudía su bastón de la euforia, - Hoy vamos a tener una actividad sorpresa – Siguió mencionando con su tono humorístico de presentador, pero se vio interrumpido por unas palabras.

-Primero, no somos amigos, y segundo, no me interesan para nada tus actividades, imb#$& - Respondía Zooble a punto de irse del escenario.

-Vaya, parece que a alguien se levantó con el pie izquierdo, o debería decir... doblado, ¿Eh, eh? *Ba dum tss* - Decía el presentador intentando sonar cómico.

-Wow, a nadie le hizo gracia, que sorpresa – Dijo Zooble mientras ponía los ojos en blanco.

-¡Ja! Público difícil ¿No es así? – Respondía Caine. -De todas formas, la actividad de hoy será cazar unos Mionks – Seguía contando el presentador con entusiasmo.

-¿"Mionks"? Suficiente con los Gloinks, ¿Ahora Mionks? – Preguntaba Pomni.

-¿Nos puedes decir qué c#&@%$ es eso? - Respondía Zooble ya irritada por las acciones de Caine y sus palabras inconclusas.

-¡Que gusto que preguntaras! Bueno, los Mionks son como los Gloinks, pero una versión un poco más... Eh ¿Cuál es la palabra?, ah sí, ¡EXPLOSIVOS! – Mencionaba Caine con orgullo de su idea mientras le brillaban sus ojos en modo que sus pupilas tenían una forma de estrella. -Su trabajo será llevarlos hasta el cuarto que está al otro lado del escenario, pero tengan cuidado, si se agitan mucho a los Mionks estos terminarán explotando, ¡Soltando una sustancia viscosa que los hará adherirse a donde sea!, al suelo, paredes, techo, donde sea que les caiga se convertirá en un super adhesivo, y créanme que no es fácil de quitar. – Decía Caine aprovechando el silencio para tomarse la libertad de hablar sin interrupciones. – Y tú, Pomni, sólo te diré sugeriré que esta vez sí sigas las ordenes, tú sabes muy bien que no hacerlo terminó casi en una tragedia – Le decía Caine a Pomni acercándose a ella a menos de un metro.

No lo recuerdas... ¿Verdad? ( Pomni x Jax - The Amazing Digital Circus)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora