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Positivo

Armin demostraba una sonrisa triunfante, su mirada estaba llena de emoción. En toda la junta ejecutiva el no paraba de dedicarle ciertos guiños a su amigo, Eren, cosa que dejó algo consternados a los que se daban cuenta, incluso el propio Eren, quien no terminaba de entender el porqué de su actitud. Al cabo de un par de horas los hombres dieron por terminada la sesión. Cada uno se despidió del otro y regresaron a sus respectivas rutinas.

Antes de que Jaeger cruzara la puerta y asegurándose que nadie los viera, su joven amigo lo tomó de la mano y lo llevó directo a su oficina, donde cerró la puerta con seguro.

—¿Qué crees que estás haciendo, Armin?

El rubio volvió a enseñar esa sonrisa triunfante. —Soy tu mejor amigo y tu mejor empleado, y tu mejor socio y la mejor persona que vas a poder conocer en la vida. Más te vale decirlo.

Eren arqueó una ceja confundido. —¿De dónde vino todo ese subidón de autoestima? Estás raro...

Arlert solo sacó unos papeles de su escritorio y se los entregó a su amigo.

—Lo conseguí, ¡Maldita sea, Eren! ¡Lo logré! —decía mientras dejaba salir algunas lágrimas. —Creí que nunca lo haría.

El otro hombre solo revisó los papeles aún confundido. Casi al instante recibió una cachetada de parte del otro.

—¡¿Eh?!

—No me has dejado dormir durante casi un mes. Tengo ojeras en las ojeras. ¡Vamos di algo, desgraciado! Di que te debo la vida y besame los pies —Eren seguía sin procesar que Armin le pegó —Te conseguí el vientre.

—Ah... ¿era eso? —decía con simpleza. En realidad claro que le importaba, sólo que seguía sin creer que su amigo lo golpeara.

—¡Si!

—Wow... —él caminó al otro extremo de la oficina, ahora si que estaba prestando atención de verdad —wow... ¿En serio? —el otro asintió —¿No puso ninguna oposición al contrato?

—Para nada, es la candidata perfecta. No hay historial criminal, no hay enfermedades hereditarias, está en su etapa más fértil, es joven y bonita, y por sobre todas las cosas desea cooperar al cien por ciento.

Fue entonces que el castaño sonrió por fin, se acercó al otro y lo estrechó en sus brazos.

—No sé qué sería mi vida sin ti.

—Bueno imagina eso pronto, planeo tomarme unas vacaciones.

—¿Eh? ¿Así de la nada? Todavía tenemos un proyecto juntos que terminar. Además no puedo dejar que alguien más lleve al mando lo del bebé.

Armin frunció levemente el ceño —Nuestro proyecto está en una fase donde no necesitas tanto de mi ayuda, yo sé que podras sólo por un tiempo. Por mi parte yo seguiré con la investigación y te ayudaré desde lejos, no lo voy a abandonar, después de todo fue mi idea —él palmeó el hombro del castaño. —En cuanto al bebé si te dejaré solo.

—¿Por qué?

—Porque es tu hijo, cabeza hueca. La mujer que encontré quiere hacer las cosas fáciles, no creo que te genere ningún problema, será pan comido.

Eren asintió, miró los ojos y rostro cansado de socio —Te ves acabado, entiendo más que nadie que te mereces un descanso. ¿A dónde irás?

—Planeo hacer un viaje en crucero con Annie rumbo a Marley. No creo tomar más de seis meses, para cuando regrese tu bebé probablemente esté a poco de nacer. Llegaré a tiempo para verte convertido en un padre, más te vale que para esa fecha ya hayas madurado lo suficiente y aprendido cómo ser un buen padre.