Entre el sol, la estrella y la fama

Capítulo 9

Hermano

Regulus no recuerda mucho de lo qué pasó mientras lloraba para haber terminado en el carro de Sirius yendo a la casa de este, ni de cómo Sirius masajeaba su cabello mientras manejaba pero no decía nada, el calor de las manos de su hermano lo tranquilizaba.

Él le había dicho que quería ir con él en el día que escapó de casa, de ahí no recordaba nada más. Solo los brazos de su hermano alrededor de él.

— ¿Quieres quedarte hoy? — llamó su atención apretando lentamente su agarre.

— ¿Quedarme? — dudo. — ¿En tu casa?

— Si. — afirmó mirándolo con una sonrisa comprensiva. — Si quieres, claro.

Regulus bajo la mirada y se encogió un poco pero pensé unos segundos, miró a su hermano y le dijo:

— Está bien pero yo hago la comida.

— Claro que sí, tu comida es la mejor.

Regulus solo río ante el halago.

~~~~~~~~✩°｡⋆ 𖤓 ⋆｡°✩~~~~~~~~

Aunque Regulus dijo que él haría la comida, Sirius lo ayudó con algunas cosas. Ninguno habló de lo qué pasó en el restaurante y para ellos no era necesario puesto que con solo mirarse sabían que estaban bien así.

El sonido de la cerradura de la puerta principal sonó.

— ¡Llegue! —  gritó Remus.

— ¡En la cocina! — le respondió Sirius.

Mientras los pasos se escuchan Remus habló:

— ¿Cómo te fue con Regulus? —  las palabras se alargan cuando vió a regulus cocinando. Le dio una sonrisa y se la regresó. — Veo que bien. Hola Regulus.

— Hola, Lupin.

— Puedes decirme Remus. — dijo mientras se quitaba su suéter y se sentaba en la barra de la cocina.

— Remus. — repitió para sí mismo, aún los otros dos podían escuchar. — Claro, Remus.

Mientras seguían hablando entre los tres, entre las nuevas películas y las antiguas de Regulus y las canciones de los merodeadores, Regulus empezó a agarrar confianza con ellos.

— Llegue a ver una película donde salías. — declaró Remus pero al parecer no recordaba bien cuál era. — Donde eres el hermano pequeño de la protagonista.

— Hice muchas donde era el hermano pequeño. — alzó una ceja divertido. — Se más específico.

— Es que no recuerdo bien. — parecía frustrado por no recordar bien. — Dios ¿cómo era?

— No te quemes la cabeza, Moony. — dijo James. — No sabía que teníamos invitado, hubiera llegado más temprano.

Regulus había olvidado el  hecho que volver a tener una relación más cercana con Sirius venía incluido James.

James recargado en el marco recargado. Su gorra roja al revés dejando el visera atrás haciendo ver tan juvenil y sexy.

"Mulciber no se debe enterar que pensé en eso".

— Soy un invitado especial, Potter. — recargó su brazo en la barra para recargar su cara en su palma sonriéndole dulcemente a James. — Lo dejaré pasar esta vez pero a la siguiente vez no.

— Entonces estaré esperándote en la puerta. — James se acercó a la barra y recargó sus brazos en él. — Hola, Pads.

— Hola, Prongs. — dijo distraído abriendo el horno para ver la comida. — Hicimos lasaña.