Capitulo 4: Te comprendo

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Se encontraba sentado muy alto viendo hacia el horizonte, el ambiente era apacible, hasta que cerro sus ojos y comenzo a recordar...
《Muchos han caido...》
Se escuchaban gritos, explosiones y el filo de espadas chocar.
《Muchos se han sacrificado...》
Muchas gemas habian quedado sin dueño, tiradas en el suelo y los restos de otras yacian dispersos, rotos.
- ¿¡Que estas haciendo?! - Grito una joven gema de piel naranjiza y cabello azul oscuro, veia impresionado como una gran bestia de casi 2 metros de alto sostenia en su hocico a una chica justo en donde se ubicaba su gema.
- ¡¡Labradorita!! - Fue lo ultimo que escucho de ella, aquel desgarrador grito que puso fin a su existencia, sus ojos llenos de lagrimas que cayeron al suelo lo congelo, el lobo habia roto por completo su gema como si se tratase de una rama, haciendola desparecer en una explosion.
- ....No....Cristal....¡¡NOOOO!! - La gema de piel naranjiza se arrodillo al ver aquella gema, Cristal, ser destruida, la bestia se percato de su prescencia y se acerco poco a poco, sus gruñidos alertaron a Labradorita, que se habia levantado furioso para tratar de hacerle frente a ese monstruo.
《 Somos todo lo que queda...》

......

- ¡Oniix! - La gema oscura abrio sus ojos, fue sacado de sus pensamientos por una voz familiar, el pequeño Steven se acercaba hacia el con cautela de no caer, pues estaban ambos sobre la mano de la estatua del templo.
- ¡Steven! ¿Como estas hoy? - Onix sonrio feliz de ver a su amigo por la mañana.
- Onix, las gemas te estan buscando, dijeron que te necesitan.
- ¿Hay algun problema? - la seriedad tomo lugar en su rostro.
- Dijeron que es acerca de una mision, una mision importante. - Onix se apresuro a levantarse, tomo a Steven entre sus brazos y se lanzo hacia abajo junto con el para caer sobre sus pies en la arena, en vez de asustarse, el pequeño disfruto de la caida libre. Llegando a casa entraron con prisa y pudieron ver como Garnet y Perla hablaban con Amatista estando las tres paradas sobre el portal, pero al verlos entrar suspendieron su platica.
- Onix - Dijo Garnet a modo de saludo.
- Que bueno que llegas. - Dijo Perla recibiendolo amablemente.
- Justo a tiempo viejo. - Dijo Amatista emocionada.
- Graciaas. - Dijo sonriendo sintiendose bienvenido y apenado a la vez.
- No fue dificil hallarlo. - Menciono Steven orgulloso y con una sonrisa por un trabajo bien hecho.
- Steven menciono algo acerca de una mision, ¿De que se trata? Estoy preparado. - Onix puso su puño sobre su corazon e hizo una reverencia ante el grupo, su rostro se veia decidido y confiado.
- Ultimamente han aparecido gemas corruptas cuando creiamos haber atrapado a todas - Dijo Garnet refiriendose a la gema oscura, quien se habia puesto en posicion firme - tu mision sera visitar ciertos lugares y verificar el perimetro en busca de cualquier señal de mas gemas corruptas, Amatista ira contigo - La gema purpura guiño un ojo a Onix y levanto su puño extendiendo su pulgar.
- Una mision de reconocimiento, entendido Garnet. - Aseguro Onix sin perder su posicion.
- En todo caso de encontrar alguna - intervino Perla - no lucharan, solo queremos un informe acerca de ella, seria peligroso luchar contra un enemigo que no conocen del todo.
Onix asintio con su cabeza, revolvio el cabello de Steven regalandole una sonrisa y se acerco hasta el portal, Garney y Perla bajaron de el para dar permiso a la gema oscura y a su compañera purpura de partir a su mision, en su interior, Onix se encontraba emocionado pero trataba de disimularlo para denotar compromiso.
Ambos, Onix y Amatista, se miraron el uno al otro y sonrieron, en ese instante fueron envueltos en un haz de luz dejando atras la casa y encontrandose de pronto en otro sitio completamente diferente, por el ambiente humedo y la vegetacion parecia ser una selva tropical, el portal habia sido cubierto con algunas ramas, y a su alrededor plantas con hojas grandisimas casi lo escondian muy bien.
- ¿Donde estamos? - Pregunto Onix curioso
- Ni idea ¡ja! - se bufo Amatista -Pero espero que estes listo chico nuevo. - La gema purpura golpeo el hombro de su compañero a modo de broma, pero despues de haberlo golpeado, una onda de energia oscura salio de Onix, impulsando a Amatista hacia atras y desiquilibrandola.
- ¡Lo siento! ¡No es a proposito! - Onix trataba de disculparse, pero Amatista, en vez de enojada, se veia soprendida.
- ¿Que fue eso? Ha sido lo mismo que utilizaste cuando Perla te corto. - La voz de Amatista parecia curiosa y extrañada a la vez.
- Bueno... Es una de mis hablidades, puedo absorver los golpes y utilizarlos, ya sea como ondas expansivas de energia oscura o tomando su fuerza y usarla a mi favor.
- Woooow - Amatista se incorporo inmediatamente - ¿Que mas sabes hacer? - Pregunto intrigada.
- Veras, tambien puedo...
La conversacion de ambos fue interrumpida por un ruido a la lejania, un ruido constante que partia ramas y sacudia las hojas, Amatista y Onix guardaron silencio, Onix se trepo en los arboles sigilosamente mientras su compañera lo siguio convirtiendose en una simpatica ardilla purpura para evitar el contacto con lo que fuese que se aproximaba, el ruido se hacia cada vez mas cercano y fuerte, ambos estaban expectantes, de pronto, una bestia enorme y deforme aparecio, un cocodrilo de 6 patas, 4 ojos y dos brazos en su espalda cuyo color era un extraño amarillo verdoso, su tamaño: enorme, desde su hocico hasta su cola media aproximadamente 9 metros de longitid, curiosamente llevaba una gema en su cola y otra en una de las manos, ambas parecian astilladas. Amatista y Onix vieron impresionados a la bestia que se dirigia poco a poco hacia el portal, pero lograron notar algo, su hocico no iba vacio, sobresalian de el una pequeña pierna, y dos brazos y de ellos escurria sangre.
- 《¡Es un niño humano!》- Susurro Onix a Amatista que veia a la bestia impresionada.
- 《Esta....E-esta...》 - Amatista no terminaba sus frases, su voz se escuchaba temblorosa.
El enorme cocodrilo llego al portal y se poso encima de el, una de las manos de su espalda se estiro y toco la base, haciendolo desaparecer en un brillo azul, ambas gemas bajaron del arbol, Amatista regreso a su forma original pero se veia asustada.
- ¿Que rayos era esa cosa? - Pregunto la gema oscura.
- No tengo idea pero rayos ¡¿viste su hocico?! - Dijo Amatista alterada
- Tenemos que seguirla Amatista, podria dañar a mas personas.
- ¿Que esperamos? ¡Vamonos!
Ambas gemas corrieron hacia el portal y, creyendo que la encontrarian, activaron el portal de la misma forma que la bestia lo hizo, envueltos por el resplandor azul de pronto se vieron en un lugar muy diferente, esta vez el frio lo cubria todo, un campo congelado con pilares de hielo que sobresalian del suelo.
- Aqui fue donde luchamos contra esa gema para encontrar la Estrella Explosiva. - Le menciono Amatista a Onix, ambos miraban a su alrededor, trataban de ver signos de aquella bestia - ¿Vez algo?
- No veo nada mas alla de la nieve - Onix bajo su mirada hacia Amatista - Tenemos que separarnos, talvez encontremos algo si lo hacemos - Sugirio.
- Muy bien. - Secundo Amatista
Ambas gemas invocaron sus armas y se separaron uno por cada lado, Onix miraba a su alrededor mientras caminaba cuidadoso, en ocasiones se agachaba para comprobar la nieve a sus pies, pero no habia nada, ni huellas y ni siquiera un rastro de la sangre que brotaba de las extremidades que sobresalian de la boca de aquella cosa. Amatista hacia lo mismo que su compañero, apretaba fuertemente el mango de su latigo en caso de algun avistamiento, pero tampoco veia nada ni oia nada, unicamente los susurros del aire glaciar en el ambiente, pero de pronto algo a la lejania la hizo entrecerrar sus ojos para ver mejor, algo se acercaba poco a poco, no parecia algo normal, no podia distinguirlo bien, asi que trepo por un monticulo de piedra y hielo para observar mejor.
Onix cerro sus ojos e intentaba usar sus antigüas habilidades pero le fue imposible, no escuchaba nada en la proximidad, se frustro por un momento a causa de eso, aunque uno de los pilares de hielo llamo su atencion y se acerco para fijarse mejor, pudo notar que retumbaba, sintio de pronto como el suelo a su alrededor lo hacia ligeramente, miro a su alrededor, nada.
Amatista continuaba observando a la distancia trepada en el monticulo, vio como lo que sea que fuese ya no se acercaba lentamente despues de que se detuvo por un momento, esta vez se acercaba rapidamente, se escucho el potente rugido a lo lejos, lo que antes parecio pequeño se habia hecho gigantesco conforme se acercaba, Amatista bajo del monticulo y quedo atonita despues de haberlo visto mas de cerca.
Onix comenzo a correr, esa bestia salio del suelo y habia partido una de sus dagas con la boca enmedio de su mano deforme, trataba de encontrar el portal, la bestia que le seguia era aun mas grande que el cocodrilo y aun mas bizarra, una especie de zorro blanco sin ojos y dos bocas, una de ellas aparecia donde deberian estar sus ojos y su hocico se extendia en forma de brazo y mano, sus patas alargadas mostraban en sus tobillos gemas rotas, combinadas. El pseudo zorro atacaba a Onix con la boca de su mano mientras el seguia corriendo, esquivando cada mordida, necesitaba encontrar a Amatista pronto.
La gema purpura atrasaba la carrera de su cazador arrojando contra el trozos de hielo, los cuales alcanzaba con su latigo, pero este no sentia siquiera el impacto, Amatista comenzo a correr con esa bestia a sus talones, un oso polar gigantesco de 8 metros de alto con 7 ojos, de los cuales 4 no tenian pupilas, su boca estaba por encima de sus ojos llena de afilados colmillos, sus patas estaban al reves, algunas no funcionaban y eran arrastradas por las manos que salian de sus costados, la gema purpura estaba aterrada ante aquel ser monstruoso y solo podia correr, su latigo no la dañaba siquiera un poco, levanto su mirada y vio el portal, y otra enorme bestia que perseguia a su amigo Onix muy de cerca.
Onix dejo que una de las mordidas alcanzara su brazo, con lo cual despidio una gran onda expansiva de su cuerpo, aturdiendo a la bestia dandole tiempo de alcanzar el portal, Amatista se aproximaba, la gema oscura abrio muy grandes sus ojos al ver la bestia que perseguia a su amiga, Amatista arrojo su latigo hacia Onix y este lo atrapo, tiro fuerte de el trayendo a su amiga hasta el portal, desaparecieron antes de que el mosntruoso oso o lo que sea que fuese se abalanzara sobre ellos.
Se encontraban exhaustos, vaiajando por la Distorsion Galactica, no podian entender que clase de gema o bestia habian visto; deformes, agresivos, bizarros.
- No puedo creerlo - Dijo Amatista - ¡¿Que rayos eran esas cosas?!
Onix permanecio en silencio.
- Casi nos matan amigo, esa estuvo bastante cerca. - Amatista se escuchaba consternada pero a la vez aliviada.
Onix permanecio en silencio con su rostro agachado, se veia pensativo y desgarrado, reflexiono hasta ese momento que aquellas bestias tambien llevaban en sus manos humanos muertos y mutilados.
Apenas Amatista iba tratar de sacar a Onix de sus pensamientos cuando ambos habian llegado a un lugar, un lugar que guardaba oscuros secretos y tristes recuerdos: El Kindergarden.
- ¡¿Que?! ¿Porque estamos aqui? - Se pregunto rotundamente Amatista con las manos en la cabeza.
- No puede ser... - Onix cambio su expresion a una de horror al ver donde estaba, comenzo a caminar observando todo, su mirada y su rostro comenzaron a desvanecer y palidecer.
- ¿Que pasa? Estas un poco raro viejo - Amatista intento acercarse a Onix pero este se movio de lugar.
- De nuevo aqui... - Dijo con voz sombria.
- ¿Eh? ¿A que te refieres?
- ...Tanto sufrimiento... - Onix levanto su mirada.
- ¿Onix? Amigo ¿estas...
- ....Tanto dolor y egoismo.....
- ¡¡Onix!! - Grito Amatista desesperada sacando a Onix de su trance.
- Amatista - Dijo sin mirarla-¿conoces este sitio?
- ¿Si lo conozco? ¡Yo... Yo naci aqui! - Contesto Amatista con dificultad.
- ¿Que? - Onix la miro sorprendido - ¿Tu tambien fuiste creada en este lugar?
- ¿Que quieres decir con "tambien"? - la expresion de Amatista cambio a expectante.
- ...Ellos y yo fuimos creados aqui - Onix bajo su mirada, Amatista abrio sus ojos grandemente - ...fue hace tanto tiempo...pero lo recuerdo bien - La gema oscura apreto sus dientes y sus puños, de sus ojos brotaron lagrimas.
Amatista no dijo nada, estaba impresionada por la revelacion, un mar de sentimientos la invadio mientras veia a su nuevo amigo tratar de contener sus lagrimas, se acerco despacio hacia el para tratar de consolarlo, golpeo la armadura de su abdomen suavemente, Onix sintio el golpe y reacciono.
- Se como te sientes - Dijo Amatista extrañamente tierna - yo tambien fui creada aqui.
- No puedes saber como me siento - Respondio Onix con esa voz aun mas sombria de lo normal - ...tu no eres como yo, por lo menos tu si tienes el control.
- Una amiga me dijo un dia que esto no es nuestra culpa, que somos lo unico bueno que salio de este horrible lugar, debemos estar orgullosos de eso.
Onix apreto aun mas sus dientes, por un momento sintio como su cuerpo temblaba, pero Amatista lo habia contenido haciendolo salir de sus pensamientos, la gema purpura miraba a Onix fijamente 《¿que otros secretos podria esconder?》 Se preguntaba.
- Sera mejor que vayamos a avisar a Garnet y Perla lo que hemos visto - Respondio Onix cambiando el tema - se acerca la noche, y no podriamos inspeccionar a oscuras.
Amatista acepto.
- ¿Estas bien? - Le pregunto,
Onix levanto su mirada y miro a su amiga, sus ojos se habia tornado mas oscuros de lo normal, una escencia oscura los rodeaba, asintio y puso una mano en el hombro de la gema purpura.
- Muchas gracias Amatista. - Onix abrazo a Amarista, la chica asintio de vuelta y desvio su mirada, se habia ruborizado un poco.
Ambos regresaron al portal dispuestos a volver a casa despues de un dia extraño y en un resplandor azul fueron llevados, pero en ese instante, justo cuando se fueron, otro ser aparecio por debajo del suelo, un resplandor verde abrio una compuerta de la cual ella salio, una gema de tonalidades verdes oscuras y claras que llevaba frente de ella una especie de pantalla holografica, parecia impaciente pues no dejaba de golpear repetidamente su pie contra el suelo.
- ¿Donde estaran esos inutiles? Crei haberlos escuchado llegar. - Se pregunto molesta antes de volver a bajar por la misma plataforma, desapareciendo sin dejar rastro.

Fin del Capitulo 4

Nota del Autor: Hola a todos! Espero les haya gustado este cuarto episodio, siempre es un gustaso escribir esta historia para ustedes cada diac:

A peticion de Toka-Chan tratare de subir mas pronto cada episodio, les agradezco mucho a todos por leerloc:

Un saludo muy grande y hasta el proximi episodio!




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