❝ Una historia con un alfa abusivo había traído al mundo lo que TaeHyung más amaba; su hijo. Luego de haber escapado de ese ambiente, él daría todo por su pequeño.
Por eso, le tocaba trabajar en un bar donde atendía a un hombre con unos hermosos ojo...
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N/A: cuando aparece esta tipografía significa que eso es algo que "dice" o piensa el omega de TaeHyung o el alfa de JungKook. Lo van a entender a medida que vaya avanzando el capítulo.
La noche había sido tan pesada. Al ser una apertura VIP solo para invitados "especiales", se podría dar a entender que era menos trabajo, ¡pero no! Esos clientes eran muy exigentes.
Había recostado a un SeungMin ya dormido y ahora se dirigía a su habitación, el dolor en su espalda era insoportable. Al entrar miró su cama como si fuera la octava maravilla del mundo.
Quitó su uniforme —una simple camisa blanca y pantalones de vestir de color negro—, al sacar su pantalón un pequeño papel cayó.
Un número de celular.
El número de JungKook. TaeHyung sonrió recordando el momento en el que el pelinegro "discretamente" deslizó el trozo de hoja por la barra, acompañado de un guiño de ojos.
Sin embargo, TaeHyung jamás llamaría. Sería una humillación; un omega con un hijo y soltero coqueteando con un alfa de alto rango. No va a suceder, no ahora y tampoco en un millón de años.
Si esa noche se fue a dormir con el pensamiento de un alfa abrazándolo, mimándolo y cuidando a su cachorro, nadie tenía que saberlo. Solo él y sus mil demonios.
◇◆◇◆◇
JungKook tenía un día horrendo. El trabajo había sido completamente estresante, a veces sus clientes eran completamente insistentes e incompetentes con sus pedidos. Ser abogado no era fácil, para nada.
Sumado a eso, su escritorio estaba repleto de papel de sus clientes "prioridad" como él los llamaba. Eran más que nada cercanos los hombres con los que se reunía en el bar.
— Hola, mi querido amigo — Jackson entró por la puerta cargando dos tazas de café.
— Hola, Jack, ¿qué tal el trabajo?
— Lo suficientemente estresante como para querer tirarme de un edificio — JungKook rio — En serio, tengo una mujer a punto de divorciarse que busca sacarle demasiado dinero a un hombre que no tiene nada.
— Bien, intentaste explicarle que eso es como, um, ¿imposible?
— Definitivamente, JungKook. De todos modos, ella no quiere comprender. ¡Me ha llamado "estúpido niño mimado"!, eso me ofendió para ser sinceros.
— Bueno, no eres un niño mimado.
— Lo sé.
— Lo de estúpido lo discutiremos otro día.
— Bastardo — espetó Jackson.
— Me lo han dicho.
— Mi omega cumple años el próximo miércoles, ¿me acompañas al centro comercial a comprarle su regalo?
