Capítulo 15

352 44 9
                                    




Narra Ta:




Un supuesto castigo de mi alfa, ya no solo incluía besos y caricias; más bien, iba con mordidas y marcas incluidas, dolor de cadera y básicamente, es doloroso levantarse al día siguiente. Sin embargo, esto es lo que yo amo de Jeff, que sea así de posesivo de mí y que me deje ser posesivo de él y que no se ofenda cuando yo estoy celoso.

- ¡Mmm!... Pero, son tus cuñados... - Dije como si quisiera salvarme, pero Jeff mordió mi pezón derecho. - ¡Auch!

- Te follaron hace dos años... - Sus ojos se tornaron en un rojo carmesí muy brillante. - No debieron ponerte una mano encima. - Dice el alfa en su interior.

- Lo hicieron para salvarme y a nuestro cachorro. - Acaricié sus mejillas y él cerró sus ojos, disfrutando del toque suave.

- Lo sé, pero eres mío y nadie debería tocarte.

Esta vez ya no me dejó responder, porque su alfa era quien más celos irradiaba, sus feromonas eran más dominantes de lo normal, pero solo pasaba cuando me juntaba con Apo y Build. Jeff empezó a arrancar mi ropa como si realmente le estorbara y sus labios succionaban varias partes de mi cuerpo, además de que su lengua entraba profundo en mi boca.

Rasguñé sus brazos cuando sentí una mordida en mi labio inferior y el sabor metálico de la sangre se mezcló durante el beso; sus manos seguían recorriendo mi piel y de repente se levantó para quitarse la ropa. Los músculos de Jeff están muy bien formados y aunque es delgado, tiene una fuerza asombrosa, más que nada cuando se trata de sexo.

- ¿De quién soy? - Me pregunta mientras empieza a gatear sobre mi cuerpo.

- Eres mi alfa... - Contesté en un susurro. - ¿Y yo de quién soy? - Le devolví la pregunta sin dejar de ver su fuerte pecho y abdomen.

- Eres mi Omega... Mío, todo mío...

Sentí su polla presionar en mi muslo cuando se inclinó hacia mi cuerpo, sus manos se volvieron tentáculos, besaba mis labios, mis mejillas, dejaba marcas en mi cuello y yo lo permitía. Con su mano derecha levantó mi pierna, haciendo un espacio para bajar dando besos en mi pecho, lamiendo y succionando mis pezones, antes de bajar a mi ombligo.

Las manos de Jeff apretaban firmemente mi cadera y mi cerebro se sentía en blanco, no podía pensar en nada más que no fuera Jeff castigándome fuertemente el culo. En cambio él seguía torturándome, pasando su lengua en círculos alrededor de mi ombligo y luego bajando aún más para morder mis muslos e ignorando mi doliente erección.

- Jeff... ¡No seas cruel! - Le reclamé.

- ¡No deberías disfrutar de un castigo!

Sus palabras dieron justo en el punto, pero siempre estoy buscando que me castigue, por lo bien que se siente cuando me muerde y me folla hasta dejarme con ardor en el culo. Cómo ahora que me giró sobre mi propio cuerpo, quedando boca abajo y me dio tremenda mordida en la nalga izquierda que casi me sacó las lágrimas, pero quería más.

Sus manos apretaban mis muslos, haciéndome perder la poca cordura que quedaba en mí y al final, casi me vuelvo loco al sentir como algo húmedo entraba por atrás y supe que era su lengua. Sus manos volvieron a subir y pronto dejé de sentir aquello viscoso que me daba placer al punto de hacerme gemir hasta que mi garganta ardía.



PLAFF...



- Dije que no debes disfrutarlo... - Me regaña Jeff después de darme una exquisita nalgada.

- ¡Castígame, amor... Me he portado muy mal! - Dije antes de apretar la almohada entre mis manos para reprimir la sensación de deseo.

- Basta, no hables así... O no lo haré. Veo que lo disfrutas demasiado. - Se queja y se aleja.

Un Alfa Obsesionado "JeffTa"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora