GET HIM BACK! || El Mariana #2TD

10. Sobrevivimos

De regreso en Monterrey...

Mi mente se había aclarado en este viaje.

No extrañaba a Osvaldo, extrañaba los recuerdos que tenía de él.

Al comienzo si fue un idiota conmigo, pero se que está arrepentido por todo, ya pasaron años y lo más sano era soltar todo y dejar las cosas en paz con él.

Cuando él fue a verme después del accidente fue lo que menos esperaba que pasará, lo esperaba de muchas personas, pero él...

Se había preocupado y se que aún me conserva con cariño, tal vez él pienso que me ama, pero no es así, Osvaldo también extraña a recuerdos.

Ambos cambiamos...

Así que el perdón puede tardar más de lo esperado, pero se siente una gran satisfacción cuando por fin sueltas algo que ya no tiene interés en tu vida.

Ahora todo era claro...

Tenía que solucionar algo ahora mismo que llegue a Monterrey o puede que sea demasiado tarde.

—Gracias — menciono para el Uber cuando me deja frente a mi casa y me ayuda a bajar las maletas.

Me acercó a la entrada y en ese momento me doy cuenta que frente a mi está Roberto.

Está sentado en el piso, pero apenas nota mi presencia se levanta.

—Olivia — murmura mi nombre.

Estamos lejos, pero se perfectamente que eso dice.

Me acercó y suelto las maletas para verlo.

Sus ojos brillan, pero me mira con pena o arrepentimiento, como si algo pasará con él.

—Estaba preocupado por ti — menciona — Queria ir a verte, pero Juan me dijo que estabas bien, pero no me sentía tranquilo, así que estoy aquí esperándote desde las siete de la mañana — habla rápidamente.

Se notaba su preocupación por su tono de voz y se lo veía cansado.

—¿Qué te parece si mejor entramos? — cuestiono.

Él asiente.

Nos adentramos a la casa y él me ayuda con mis maletas.

—Bueno — me quito mi saco y lo dejo en uno de mis sofás — Roberto, yo...

—Me gustaría hablar primero — me interrumpe.

—Rob...

—Por favor — pide.

Asiento, él camina y se coloca frente a mi.

—Olivia, perdóname.

—Roberto — susurro su nombre con delicadeza.

—Yo, no sabes cuan preocupado estaba por ti, pensé que si te pasaba algo no lo iba a soportar — confiesa — Pensé en la última vez que nos vimos y no quería que ese fuera la última despedida por mi parte, yo...

Me acerco un poco más a él y acarica su mejilla.

—Lo sé — murmuró.

—Lo lamento — agacha su mirada — Ni si quiera puedo verte a los ojos porque me siento muy apenado, yo nunca quise decir eso, no queria presionarte, Olivia, de verdad.

—Lo sé — repito tomando su rostro entre mis manos.

El pelinegro alza su mirada y hago que me mire.

—Yo sé que sufriste demasiado, nunca quise que sintieras que te estaba obligando a tener algo conmigo, yo esperaré, lo haré, solo... No quiero que estemos alejados de nuevo — menciona Roberto.

—Todo lo que paso fue mi culpa — comento — Estaba confundida, pero ya no más...

Roberto me observa con concentración en cada uno de mis movimientos.

Acaricio su mejilla y uno su frente con la mía.

—Gracias por ser tan paciente — susurro — Tenía miedo de volver a estar con alguien mayor que yo, pero me enviaste que no todas las personas son iguales y que las situaciones son distintas.

Me alejó un poco.

—Yo sé perfectamente que tu no eres él y eso me alegra, me costó alejarme, pero siempre fuiste tú, Roberto... siempre.

Una sonrisa se posa en su rostro.

Inclino mi rostro y acortó esa corta distancia que nos separa para besarlo.

Mis manos se posan en su pecho aferrandome a él, sus manos sujetan mi espalda y por esos cortos segundos solo somos él y yo.

Nada se sentía como esto...

El amor era difícil de hayar, a veces ese primer amor o primer beso creemos es con la persona correcta, pero no es así.

Es malo amar demasiado a alguien...

El primer beso o primer amor no son importantes.

Lo importante es que sea con la persona correcta.

A veces el tiempo es demasiado largo o demasiado corto para que las cosas sucedan.

Nos van a torturar los recuerdos, pero al final todo pasa y antes de que nos demos cuenta...

Sobreviviremos.