No te entiendo.
Bajo el manto de la noche estrellada,
donde tus manos secaban mi llanto,
tu voz, un bálsamo que mi alma calmaba,
¿acaso fue falacia o sincero encanto?Cuando mis pedazos rotos se hallaban,
¿fue auténtico el apoyo compartido,
o solo fue sombra de lo que ansiabas?Decías "te quiero", sin reserva,
bajo la luna y la brisa sosegada,
iban consigo nuestros más oscuros pensamientos,
tus palabras, dulce melodía,
pero, ¿se desvanecieron al alba?Tus abrazos y besos, cariño y pasión,
¿se transformaron de repente en confusión?
Juraste no cambiar, ser mi protección,
¿o fue la pasión la que nubló nuestra unión?No me pesa haber probado tu caricia,
aunque el rechazo no deja de persistir,
el corazón se me parte cada vez que pienso
en ti.