The vulturi | Edward Cullen

Capitulo tres

"Cazadora"

Al soltar esa revelación sintió como el ambiente se tensó una vez más.

—¿Una Vulturi?—pregunto horrorizado Amun.—¿vamos a confiar en una luego de que su clan es el que nos quiere muertos?—exclamó con tono desconfiado.

Noah suspiro y ladeó la cabeza, al hacerlo noto la clara sonrisa burlona de Edward, como si le estuviera diciendo, "vete no queremos una Vulturi aquí". Al parecer sigue resentido después de tantos años.

—Con todo respeto, Amun. Los Vulturi no te quieren muerto, o al menos no a ti.—comenzó a decir burlona la rusa.—Y para aclarar ya no respondo a ningún nombre asociado con los Vulturi. Yo no soy responsable de todos los actos que han echo estos últimos años, como por ejemplo; asesinatos, muertes, influir el miedo en las nuevas generaciones de vampiros....esas son cosas creadas por Aro.

—¿Por que te fuiste del clan?—Pregunto la neófita

—Creo que te estás confundiendo, bella. Yo nunca me fui, ellos me exiliaron.

—¿por qué?—Volvió a preguntar la neófita.

—No por qué, sino por quien. Aro comenzó a notar que no podía controlarme. Al notar esto comenzó a manipular a mis seguidores con la ayuda de el poder de Chelsea. Primero se ganó a Chelsea y, luego ambos convencieron a todos, incluido mi hermano. Aro les había dicho que estaba creando un clan para sustituirlos y matarlos, así que escape. El escapar me ha salvado hasta ahora de una muerte dolorosa.

—¿Como conseguiste que no te siguieran?—pregunto Benjamin, el protegido de Amun.

Noah soltó una pequeña risa, dejando ver sus colmillos.

—Cuando escape de Aro, le deje una carta de despedida, cosa que al parecer no le agrado mucho pues el juro que cuando
Me encontrará me mataría enfrente de todo el mundo vampírico. Así que si hasta el día de hoy Aro sigue cazándome. Mi don es lo único que me ha ayudado a que el no me encuentre.

—¿Cual es, cual es su don, señorita?—Pregunto la pequeña hibrida.

—Mi don...bueno es un poco parecido al de tu madre, solo que algo más complicado.

—¿También tienes un escudo?—Pregunto bella con un deje de sorpresa.

—Si o bueno no.—contestó.—Es algo difícil de explicar.

—Dilo ya.—hablo Edward.—No es tan difícil de explicar.

—Bueno si no lo es, hazlo tú.—exclamó con tono altanero la rusa, guiñando un ojo hacia el lector de mentes mientras se sentaba en uno de los sillones.

—El don de Noah consiste en un camuflaje, como un escudo, pero a la vez no.—comenzó Edward.—Su don le permite pasar desapercibida entre los vampiros, es por eso que cuando llego nadie la pudo ver venir. Nadie puede verla ni los mejores cazadores de los Vulturi pueden hacerlo. Es como si ella no existiera. Te puedes reflejar en ella pero no la puedes ver, sentir o escuchar. Noah decide si la puedes ver o no. Aunque también puede ro...—Antes de que pudiera terminar Carlisle lo interrumpió.

—Aro la consideraba la mejor cazadora en la historia.—comenzó Carlisle.—Los años que estuve con los Vulturi, siempre hablaban de una vampiro con el poder de un dios. Aro la usaba para cazar a los vampiros con dones inigualables, aunque hubo un tiempo en donde Noah dejo de hacerlo, desde entonces Aro sabía que en cualquier momento ella se rebelaría en su contra así que el decidió actuar antes que ella lo hiciera y así fue como la ayude a escapar.

El silencio los rodeó. Debían analizar la información recién dada, que la rusa estuviera con ellos significaba peligro.

—Hay algo que no me cuadra.—dijo una nueva voz. Todos se giraron hacia el lugar que provenía, Maggie, miembro del clan irlandés con un don que le permitía detectar las mentiras, fue la que habló.

—¿Y eso es, jovencita?—pregunto con curiosidad la castaña.

La femenina había detectado una mentira de Carlisle. Aunque la rusa ya sabía a lo que se refiera quiso meterle dramatismo a la situación.

—Carlisle dice que dejaste de cazar vampiros, pero he detectado que eso es mentira. llego a la conclusión de que lo sigues haciendo.

Noah abrió la boca como para hablar pero pronto la cerró. La vampiro mordisqueó su labio inferior mientras pensaba como explicar aquello. Al cabo de unos segundos, se puso de pie y camino lentamente hacia Maggie, cuando estuvo en frente de ella la miró de abajo hacia arriba, para después mirarla fijamente a los ojos.

—¿Sigues cazando vampiros?—Pregunto Maggie con su aniñada voz entrecortada.

—Puede ser...—contestó con una cínica sonrisa.

¡Hola! Se que el capítulo es muy corto pero no tenía ni idea de
como hacer el capítulo, así que decidí explicar el don de Noah.

lamento los errores ortográficos.

Espero les haya gustado, aunque estuviera corto.