6 | 𝐖𝐡𝐲 𝐲𝐨𝐮, 𝐰𝐡𝐲?

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𝑷𝒐𝒗'𝒔 𝑫𝒂𝒓𝒊𝒂

El dolor punzante que emergía de mi zona baja era tan intenso que me hacía llorar sin parar. Sentía una profunda impotencia y asco al percibir como entraba y salía, desgarrándome. Mientras escuchaba sus jadeos resonar en la habitación, solo podía pensar en morir en ese momento. Me aferraba a la esperanza de que todo fuera solo un maldito sueño y deseaba escapar corriendo.

En un intento desesperado por liberarme de él, me di la vuelta bruscamente, moviendo mis caderas enérgicamente junto con él, logrando que saliera de mí. En ese instante, mientras él caía lejos de la cama, me levanté rápidamente y corrí hacia la puerta. Con un movimiento rápido de mi muñeca, abrí la puerta y me lancé escaleras abajo. Estaba asustada, con el corazón acelerado, intentando bajar del segundo piso lo más rápido posible mientras escuchaba el resonar de pasos corriendo detrás de mí, lo cual me erizó la piel. Salté un escalón antes de llegar al último, solo quería salir de allí, sin importar que estuviera desnuda.

De repente, escuché otro salto que impactó fuertemente en el suelo y claramente no era mío. No quería voltear, solo pensaba en huir de ahí. "Corre", era lo único que pasaba por mi mente. Pero justo antes de llegar a la puerta, sentí como mis cabellos eran jalados con tanta fuerza hacia atrás, haciéndome caer al suelo. Los golpes comenzaron a llover sobre mí, bofetadas específicamente. Intenté cubrirme el rostro, pero fue en vano. Noté como me agarraba fuertemente de la muñeca, arrastrándome por todo el suelo hasta llegar a lo que parecía ser la cocina. Intenté levantarme, pero me quedé paralizada al sentir como algo cortaba mi muñeca. Miré hacia arriba y noté como la sangre brotaba de la herida que él había ocasionado en mi muñeca, escurriendo hasta mi hombro. Fue inevitable soltar un grito desgarrador al sentir el filó del cuchillo llegar hasta el final de mi delgada muñeca. Él la soltó, haciendo que mi brazo cayera pesadamente al suelo. Y de repente, él estaba encima de mí, con el cuchillo en la mano, apuntando a mi cuello, jugueteando con el, rozándolo peligrosamente.

—Por favor, basta, no.... –Implore con voz quebrada y lagrimas en los ojos

— Shhh –Murmuró con una sonrisa dibujada en su rostro

Decidí mantenerme en silencio mientras observaba como separaba mis piernas una vez más. Negué con la cabeza mientras él sonreía, relamiéndose los labios con la lengua. Y percibí como el filo del cuchillo empezaba a cortar alrededor de mi cuello, causándome un dolor leve. Pero comprendí que no quería que protestara... entonces volvió a penetrarme bruscamente, haciendo que las lágrimas brotaran y rozaran mis mejillas enrojecidas. Seguía dentro mío mientras yo permanecía estática, sintiendo solo asco y deseos de morir. Apreté los ojos por un momento intentando convencerme de que era un sueño, pero los abrí de golpe al sentir como con una de sus manos tomaba mi pecho y comenzaba a jugar. Sentí aún más repulsión, tanto que tuve unas ganas enormes de vomitar. Sentía como tragaba mi propio vómito, y quemándome mi garganta en el proceso. Tomé aire en ese momento, él empezó a recorrer el cuchillo desde mi cuello hasta mi cadera, específicamente en la fosa ilíaca derecha, y comenzó a cortar por encima del hueso que sobresalía de mi cuerpo, haciendo que me retorciera al notar como el filo del cuchillo abría mi piel. Sentí como mi piel ardía y se quemaba. Luego bajé un poco la mirada para ver toda la sangre que salía de mí y cerré los ojos nuevamente, tratando de contener mis lágrimas.

—ABRE LOS MALDITOS OJOS–Tom se quejó con un grito molestó; encogí con poco mis hombros

—Quieres que te los saque?, MIRAME!– me volvió a gritar aún más molesto, quiero morir...

Fue inevitable que las lágrimas brotaran de mis ojos, comencé a jadear mientras me ahogaba con mi propio llanto. Estaba sumamente asustada y traté de contenerme mis jadeos apretando mis labios, pero fue imposible evitar que mis gemidos de llanto resonaran en la cocina. Mientras seguía llorando, observé con los ojos borrosos como su mirada se volvía seria, seca... sin emociones.

You're so evil ; 𝙏𝙝𝙚 𝙠𝙖𝙪𝙡𝙞𝙩𝙯 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora