Harry Potter y el Mounstro de Slytherin

Caos de Quidditch

CAPITULO 5

7 de noviembre de 1992

Harry

—¡Cállense todos! —gritó Flint.

Harry y Malfoy dejaron de susurrar. Bletchley, Pucey y Bole dejaron de discutir sobre las jugadas de Quidditch. Derrick apagó el fuego que había iniciado en el suelo de piedra de la sala del equipo por alguna razón. Se reunieron alrededor de Flint, con el estómago revuelto y los ojos muy abiertos por la anticipación. Harry flexionó y relajó sus manos, sintiendo el cuero de sus guantes sin dedos de Quidditch moverse con ellas y deseando estar ya en su escoba.

Flint no perdió el tiempo. —Gryffindor buscará sangre en este caso. —Todos sabían que era por las tonterías de la Cámara Secreta—. Así que no les dejamos salir adelante. Tenemos mejores escobas, mejores maniobras, mejores jugadores y tenemos un mejor punto que demostrar.

Hizo una pausa y miró a su alrededor. Los compañeros de equipo de Harry asintieron. Determinados.

—¡Así que vamos a mostrarle a esta maldita escuela por qué hemos tenido la Copa siete años seguidos! —terminó.

—¡Slytherin! —Todos bramaron al unísono y se movieron como uno solo hacia los estantes de las escobas, donde siete Nimbus 2001 negras y plateadas idénticas y relucientes esperaban pacientemente.

Harry agarró el suyo del estante inferior y giró hacia Malfoy. —Recuerda de qué hablamos, —siseó.

—Lo sé, Potter, ya lo repasamos tres veces, —dijo Malfoy, poniendo los ojos en blanco.

Bole les dio un ligero golpe en la nuca. —Guárdenlo.

Salieron al pasillo que conducía desde las salas de su equipo hasta el campo. En el momento en que Flint abrió la puerta, el rugido distante de la ultitud se hizo mucho más fuerte. La adrenalina hizo su primera aparición en el torrente sanguíneo de Harry. El pasillo era ancho y oscuro. Podía ver el campo y, al otro lado, la salida de Gryffindor, sólo un cuadrado oscuro y abierto en la base de la pared del campo.

—Formación, —dijo Flint.

Se pusieron en orden. Flint caminaba al frente, con Pucey, Bletchley y Harry detrás de él. Derrick y Bole caminaban detrás de ellos y Malfoy cerraba la marcha, por lo que formaron un triángulo invertido caminando juntos detrás de su Capitán, con las escobas sostenidas sobre sus hombros derechos para que los accesorios plateados de las ramitas y los reposapiés captaran la luz.

Como de costumbre, Lee Jordan estaba comentando. —El equipo de Slytherin entra al campo: ¡Flint, Pucey, Potter, Bletchley, Derrick, Bole y Malfoy!

Entre aplausos entusiastas, el equipo de Slytherin entró al campo.

—Y, no lo creo, ¡todos están volando Nimbus Dos Mil Uno! —Dijo Jordan de repente. El tono de los vítores pasó de emocionado a frenético. Harry no podía dejar de sonreír.

Era eléctrico.

—Bastante genial, ¿no? —murmuró Bletchley.

—Increíble, —dijo con fervor.

—...la escoba más rápida del mundo, con estribos giratorios y una nueva y revolucionaria aerodinámica aplicada a la forma de la cola-

—¡Jordán! —espetó McGonagall.

—Lo siento, profesor, ¡y le doy la bienvenida al equipo de Gryffindor! ¡Wood, Spinnet, Johnson, Bell, Weasley, Weasley y Potter! Un poco de rivalidad entre hermanos en el campo hoy, cuando los gemelos Potter se enfrentan en el aire por primera vez, aunque Harry Potter está jugando al Cazador de Slytherin en lugar del Buscador como muchos esperaban...