¿qué quieres de mí? ★ jakehoon

𖹭⠀࣭⠀Capítulo Uno

Estaba fastidiado, no, harto era la palabra adecuada, ese imbécil australiano y todos los idiotas tras él, le daban asco, fastidio. Lo molestaban en sobremanera. 

—¡Sunghoon! —Heeseung lo devolvió a la realidad, mirándolo mientras negaba—. Estás en otro mundo, ¿por qué estás espiando a Jake? 

—No lo espío, no me importa lo que haga —negó con rapidez, rodando los ojos—, solo creo que es un sinvergüenza de lo peor. 

—Ajá —murmuró su amigo, sin creer lo que decía. 

—Míralo, coquetea con todos, lo vi esta mañana con Yeonjun en el ascensor, fue asqueroso y ahora ve, Beomgyu parece un idiota enamorado —dijo irritado—. No sé qué le ven. 

—Deberías saberlo, estás aquí, malditamente celoso por ello —se burló su compañero—. My dear friend, abre los ojos, ese australiano sinvergüenza te tiene flechado 

—Eso no es... No —negó—, a mí no me gusta ese tipo, prefiero la experiencia y la seriedad. 

Soltó, sin pensar muy bien lo que decía, en realidad una parte de eso no era mentira, a él solían gustarle los tipos mayores, era como un gusto culposo. 

—¿Experiencia? ¿Hablas de Jongdae o Minseok? —Lo miró con una sonrisa divertida. 

—Ambos, pero son fantasías sexuales solamente —se burló, relajándose, sin percatarse de la presencia tras ellos. 

—Hoon, sí que eres un chico malo —dijo la voz detrás de ellos—, y yo que creí que eras completamente heterosexual. 

—Soy heteroflexible. 

—Es bueno escuchar eso —sonrió de forma coqueta el australiano, interrumpiendo su conversación—, suena a una buena oportunidad. 

—Ni en tus mejores sueños, Shim —Lo miró Sunghoon, girando los ojos—. Ahora, si ya dejaste de coquetear con Beomgyu, ¿podemos ir a cenar? Jungwon nos espera. 

El australiano asintió, observándolo levantarse y yendo tras él. 

—Podías haberte ido sin mí. 

—Sí, pero debo fingir que me agradas, eso incluye que debemos llegar juntos a algunos lugares, yo conduzco —Suspiró sin mirarlo, subiendo al auto, mientras Jake sonreía divertido, subiendo al lado de copiloto. 

—No sabía que te molestaba tanto que coqueteara con Beomgyu —soltó relajado. 

—No me interesa, solo no puedo creer lo descarado que eres —murmuró sin pensar—, vives coqueteando con todo el que se te atraviese. 

—No he coqueteado contigo aún, creo que eso es lo que realmente te molesta —sonrió de forma traviesa, colocando su mano sobre la pierna de Sunghoon, sobresaltándolo—. Dime Hoon, ¿estás celoso? 

—¿Por ti? —preguntó, fingiendo desinterés—. Te lo he dicho antes, aún no tienes tanta suerte. 

—Me gusta probar suerte —dijo mientras dejaba suaves caricias sobre el muslo del menor, logrando ponerlo nervioso. 

—Basta, Jake —murmuró, retirando su mano—, no soy como ellos, no vas a convencerme con tus palabras coquetas y ojos bonitos, no caeré en tu encanto. 

—¿Dices que soy encantador? —sonrió, mostrando un rastro de diversión en su rostro. 

—Digo que eres un completo sinvergüenza, ¿cómo puedes coquetear con todos? —negó, dejando ver su molestia—, Seungkwan, Soobin, Jaehyun, incluso Tesan, dime, ¿no te da un poco de vergüenza? No puedes andar por la vida enredándote con todos. 

—Solo me interesa enredarme contigo, belleza. 

—Entonces lo lamento por ti, pero eso no va a pasar —sonrió, mostrando sus dientes, mientras detenía el auto—. Ahora vamos a bajar, yo fingiré que tú me agradas y tú también harás lo mismo porque hay muchas cámaras ahí. 

Se bajó del auto, observando cómo Jake hacía lo mismo, con una sonrisa completamente divertida en sus labios. 

—¿Sabes? Yo no tengo que fingir que me agradas —Se acercó a él, sonriendo de manera coqueta—. No cuando muero por meterme en tu cama. 

Sunghoon se burló, mirándolo y negando al mismo tiempo, sabiendo que había cámaras cerca. 

—Uh, qué pena, morirás antes de que eso ocurra —Le guiñó un ojo, obligándolo a avanzar con él. 

—Llegan tarde —Jungwon los miró exigiendo una explicación—. ¿Por qué? 

—Sughoon no encontraba qué ponerse —Se encogió de hombros el mayor, ganándose una mala mirada, mientras Jungwon los observaba curioso, pues tenía sus apuestas con ambos chicos. 

—Bien, no es importante, la cena estará paga, pasen una buena noche, chicos —Les sonrió, levantándose y marchándose. 

—¿Qué? ¿Por qué se va? —Sunghoon, preguntó confundido. 

—¿No te lo dijo? Es una cena solo para nosotros —Jaló la silla, ayudándolo a sentarse—. Es parte de mi plan para conquistarte. 

—Tú, ¿estás loco? ¿Tus neuronas siguen funcionando? —preguntó mirándolo fijamente—. ¿Qué juego es este? 

—Hoonie, me gustas y sé que yo también puedo gustarte, solo tienes que ver lo increíble que soy —sonrió con superioridad—. Además, también tengo mucha experiencia. 

La mirada de Sunghoon estaba combinada entre confusión y diversión por la extraña situación en que se encontraba e iba a responder algo, pero el mesero llegó antes de que pudiera hacerlo. 

—¿Ya decidieron que comer? —preguntó amablemente. 

—Por supuesto —Jake le sonrió de forma encantadora, haciéndolo sonrojar y riendo al notar como Sunghoon giraba los ojos—, Para mí, Galbitang y para el chico lindo frente a mí... 

—Japchae —lo interrumpió Sunghoon, sonriendo hacia el mesero. 

—¿Desean ordenar alguna bebida? —Miró a ambos mientras sonreía, pensando en que el chico rubio realmente estaba molesto y que eso sería un gran problema para su novio, quien solo reía frente a él. 

—Sikhye para mí y para él, Makgeolli —sonrió el australiano, esta vez logrando adelantarse. 

El mesero asintió y se retiró, dejándolos a solas. 

—No me gusta que ordenen por mí —Sunghoon lo miró de forma acusadora. 

—Uh, ese será un gran problema en nuestra relación cariño —rió divertido, notando como el menor nuevamente rodaba los ojos—, pero podemos hacer algo diferente en nuestra siguiente cita, tú ordenas los platillos y yo las bebidas, en la siguiente a esa será al revés y así, porque planeo llevarte a muchas. 

—Creo que te golpeaste la cabeza esta mañana, amaneciste más idiota que de costumbre —rió con sarcasmo. 

—Cielo, creo que nuestra relación debe basarse en el respeto y tú sueles insultarme mucho —Lo miró divertido—, así que, a partir de ahora, voy a besarte cada vez que me insultes. 

—¿Estás loco? Creo que lo estamos llevando muy lejos, esto ya ha dejado de ser gracioso —negó. 

—Oh no, no vas a romper conmigo en nuestra primera cita. 

—Esto no es una cita, Jake, tú y yo no estamos teniendo una cena romántica ni mucho menos —negó fastidiado—. Deja de ser un idiota y compórtate como mi compañero de banda y hablemos de lo que importa, los premios del fin de semana. 

—Me llamaste idiota —rió, levantándose de la silla y acercándose lentamente a él, hasta tomar delicadamente su mentón—. Mereces un castigo, cielo. 

Sonrió y tomándolo por sorpresa, lo besó. 

—Por favor, insúltame mucho más esta noche, cariño —le sonrió, guiñándole un ojo, mientras un Sunghoon avergonzado lo miraba queriendo asesinarlo. 

Oh, y vaya que lo haría cuando vea las fotos de ese beso en la prensa.