41: Another Song About a Boy

850 20 1
                                    

Autor: HighlyOpinionatedNerd

Pareja: Sabo x Koala

Palabras: 2477

Advertencias: Ninguna

Original:
https://archiveofourown.org/works/12836505

Resumen
Koala, estudiante de primer año de canto, tiene problemas con la pieza que le han asignado. No consigue que suene como ella quiere. ¿Será capaz de encontrar la inspiración que necesita antes de la actuación?

━━━━━━

Era tarde y Koala estaba cansada. Un rápido vistazo a su teléfono le dijo que se acercaba la medianoche. Llevaba demasiado tiempo en la sala de prácticas. ¿Cuánto tiempo? No lo recordaba, pero probablemente unas dos horas y media. Demasiado tiempo.

En el atril frente a ella había una copia de la parte vocal de Gretchen am Spinnrade de Schubert. Era una pieza preciosa, sin duda, pero por alguna razón se había quedado bloqueada.

No en la técnica. No había nada particularmente difícil en esta pieza. Había un sol agudo sostenido en un momento dado, pero no era nada que no pudiera manejar. Lo que la atascaba era la musicalidad, los elementos que hacían que mereciera la pena escucharla.

Había escuchado unas cuarenta grabaciones diferentes en Youtube. Pero imitar lo que oía sonaba falso, forzado.

"Tienes que entender el significado de la letra", le dijo su profesor. "Tienes que hacer que suene natural, que atraiga al público".

Koala suspiró. Era cierto, pero no era un consejo. No sabía cómo actuar en consecuencia. Que suene natural. Estaba atascada. Quedarse sentada mirando la música no iba a ayudarla en este momento. Además, tenía clase por la mañana.

Resignada, recogió sus cosas y se fue a casa, preguntándose por qué había pensado que estudiar música sería fácil.

Mucha gente le había advertido a Koala, cuando se matriculó por primera vez, que no se matriculase a ninguna clase a las 8 am. Vale, está bien, había dicho, creo que podría soportarlo.

Así es como se encontró con una clase de Gobierno a las 9 de la mañana tres días a la semana. Y aunque no eran las 8 de la mañana, seguía siendo demasiado temprano. Demasiado temprano. Koala creía que nunca se había arrepentido de nada más que de haberse apuntado a esa clase.

Se sentó delante, en una de esas mesas largas que ponen en las aulas con demasiados alumnos para comprar pupitres individuales. A su derecha había una pared con una foto enmarcada de un anciano. Koala pensó que probablemente era alguien importante, pero nunca se había molestado en saber quién. A su izquierda había un chico alto y rubio con una cicatriz malvada en la cara. Nunca le había dirigido la palabra. Por lo visto, así funcionaban las cosas en la universidad. No hablabas con nadie que no fuera de tu especialidad, y menos en clases como ésta.

Realmente deseaba no haberse quedado practicando hasta tan tarde anoche. No había dormido lo suficiente y no estaba de humor para escuchar una clase sobre gobierno. Su profesor, un hombre canoso y siempre malhumorado llamado Dragon, era bastante estricto. Otra razón por la que Koala deseaba haber tomado una sección diferente de la clase.

"Disculpe", dijo una voz que interrumpió sus cavilaciones. Era el chico que se sentaba a su lado; acababa de acomodarse en su asiento, con una ligera capa de sudor visible en la frente. "¿Tienes la hora?"

"Sí", dijo Koala, consultando su teléfono, "son las 8:54".

"¿En serio?" Dejó escapar un suspiro de alivio. "Oh, pensé con seguridad que llegaría tarde esta mañana. Anoche estuve hasta tarde en la cancha, practicando, y me quedé dormido... Ah, ¿tienes un lápiz que me puedas prestar? Creo que me dejé el mío en casa".

One Piece CollectionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora