3.-¿Resurrección?

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Antes de desmayarme...
Se que me desangro, se que me muero y es mi final, pero solo quiero decirles a mis amigos que estoy bien y que los quiero.
Pero mi final no llega, oigo voces a mi alrededor, a Lucas llamando a la policía, a Elsa llamando a la ambulancia, a gente por la calle que grita al verme. Pero mi final sigue sin llegar.
Después de dos minutos empiezo a notar que flujo de sangre que emana de las heridas disminuye al igual que el dolor y poco a poco vuelvo a respirar con normalidad.
-Las heridas se están cerrando, -se oye gritar a Elsa entre llantos, la noto encima mia, con la frias manos en mi pecho- es un milagro.
-No puede ser, -responde Lucas con la voz apagada- eso es imp...
Entonces consigo abrir los ojos un poco y veo que Lucas me mira con los ojos muy abiertos, y Elsa me abraza sollozando.
-¿Chicos?- consigo decir- ¿Que me está pasando?
-No lo se, -responde Lucas disimulando la sorpresa- pero será mejor que nos vayamos antes de que llegue nadie.
Lucas aparta con cuidado a Elsa que parece que se está tranquilizando un poco, y me levanta en brazos torpemente.
-Vamos a la cabaña del río, -dice Elsa- allí estaremos escondidos.
Unos metros despues, consigo caminar yo solo, y las pocas manzanas ya corremos. Se oyen sirenas a los lejos y da la sensación de que cada vez se acercan más.
Conseguimos llegar a la cabaña sin que nos vean y nos acostamos a recobrar el aliento, Lucas y Elsa están confunsos desorientados y asustados, al igual que yo.
Nadie habla en cinco o diez minutos, probablemente porque no sabemos que decir.
-¿Alguien tiene una explicación o algo que saque del shock?-pregunta Elsa, -porque no se ni como describir como me siento ahora mismo.
Una lágrima empieza a recorrerle el pomulo y bajarle por el moflete. Lucas respira hondo y la sucede en el turno de palabra.
-¿Tu sabes lo que ha pasado Jordan?- pregunta.
-No tengo ni idea, -respondo perdiendo la mirada en el infinito- me desmayé, pero lo oia todo, y después empezéa notar como se me cerraban las heridas y se me iba el dolor, y después... volví a estar... consciente... o vivo.
-¿Alguna vez te había pasado algo parecido?-pregunta Elsa.
-No, -respondo cerrando los ojos y moviendo la cabeza de lado a lado- mirad, esto también es nuevo para mí, no se más que vosotros.
-Vale, lo siento -responden al unísono.
-¿Que deberiamos hacer?-pregunta Elsa nerviosa-¿Llevarte al hospital?
-No se, -digo nervioso- deberíamos buscar algo en internet.
-Voy a buscarlo -dice Lucas sacandose el móvil del bolsillo.
Toc, toc, toc. Suena la puerta de la cabaña, cosa que nunca pasa, puesto que nadie sabe que esa cabaña está a veces ocupada.
Los tres nos miramos lentamente.
-¿Será la policia?-pregunta Elsa susurrando.
-O alguien que nos ha visto entrar -sugire Lucas en el mismo volumen.
-No, -dice una voz masculina al otro lado de la puerta- no soy la policía ni mucho menos, y puedo daros respuestas a vuestras preguntas, soy un aeternam.
Elsa, Lucas y yo nos miramos confusos lentamente.
-¿Un aeternam?-pregunto en alto- ¿Que es eso? ¿Una organización gubernamental o algo por el estilo?
-No, -vuelve a negar el hombre- el gobierno no sabe de nuestra existencia, somos unos humanos distintos biológicamente al resto, si me dejais entrar o salís os lo explicaré.
-Si no dice la verdad corremos, -dice Elsa- pero si dice la verdad le escuchamos.
Asiento con la cabeza y levanto un dedo mientras hablo.
-Vale, -digo levantandome y levantando otro dedo a la misma vez- ya salimos.
Levanto el tercer dedo a modo de aviso mientras abro la puerta cuidadosamente. El primero en salir soy yo, y despues salen Elsa y Lucas que se ponen a mi derecha e izquierda.
El hombre tiene pinta de ser joven, aunque no se aprecia puesto que está cubierto de arriba a abajo con una gabardina marrón claro. Es alto y robusto y por lo poco que se ve entre las sombras del sombrero y la gabardina, tiene barba de una semana y unos ojos claros destellas en la oscuridad.
-Soy Robert -dice tendiendonos la mano.
-Nos entiende si le decimos que no tenemos razones suficientes para creer lo que cuenta, -dice Lucas nervioso- ¿no?
-Si vosotros mostrais confianza cuando os deje a mi merced y yo cuando saque una navaja, creo que tengo una manera de demostraros que digo la verdad...

Recuerdos de un InmortalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora