Jesper Fahey

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Créditos a su respectiva autora: @love-strawberry

Colm Fahey renunció a que sus hijos se hablaran hace mucho tiempo

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Colm Fahey renunció a que sus hijos se hablaran hace mucho tiempo.

Jesper dejó de enviar cartas y, de repente, a T/N dejó de importarle.

Aunque le dolía ver cómo sus hijos se distanciaban, sabía que no podía hacer nada. No hasta que fuera a verlo de todos modos.

Que es exactamente lo que hizo. Y se llevó a T/N con él.

-Se alegrará de verte.

-No, papá -dijo T/N mientras se sentaba en un taburete- se alegrará de verte. No se alegrará de verme.

Resultó que no se alegró de verlos a ninguno de ellos.

Lo estaban esperando en el lugar de trabajo, el Club Cuervo. Que T/N pensó que era un nombre estúpido porque estaba viendo una alarmante falta de cuervos y los cuervos eran la única razón por la que aceptó ir con su padre y encontrarse con su hermano.

El señor Fahey buscaba a su hijo mientras la hija se mantenía ocupada observando a la gente guapa.

Un pellizco en el brazo de su padre desvió la mirada de T/N.

-Está aquí -dijo el señor Fahey mientras se movía en su asiento- Estará muy contento.

-Estoy segura -murmuró T/N mientras levantaba la vista hacia donde miraba su padre y lo veía.

Él estaba allí, parecía tan feliz como siempre, rodeado de un grupo que T/N supuso que eran sus amigos. Y al ver la forma en que se reía con la chica de pelo rojo, sintió un doloroso tirón en su corazón.

Él era feliz aquí, lejos de casa. Lejos de su padre. Lejos de ella. Y le estaba yendo bien. Encontró a su gente y en algún lugar del camino, T/N supuso que se encontró a sí misma también.

-¡Jesper!

El grito de su padre sacó a T/N de su trance y, por primera vez en años, sus ojos se encontraron con los de su hermano.

Ella esperaba que él estuviera desconcertado, asombrado y tal vez, en algún lugar de su mente, esperaba feliz de verlos, pero al ver la forma en que sus cejas se fruncieron y se excusó de sus amigos, T/N sabía que su reacción no iba a ser la que ella esperaba.

Se dirigió hacia ellos, excusándose, sonriendo a los clientes y T/N sabía que aquí era donde pertenecía. Al corazón de Kerch.

-¿Papá? -preguntó Jesper al detenerse frente a ellos- ¿Qué hacéis aquí?

-Hemos venido a visitarte, por supuesto -dijo el señor Fahey como si fuera obvio- Hace años que no estás en casa y pensamos que por fin vendríamos a ver cómo te iba.

Jesper asintió nervioso y entonces, su mirada pasó de su padre a su hermana.

-¿Y la trajiste?- cuestionó

One Shots ● Kaz BrekkerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora