5.

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Los días habían pasado. Freen no podía sacar de su mente a Becky, y claro, tenia a su hija que la recordaba día a día. Un día casi la corre de casa solo para que le hablara a Rebecca para que la cuidara, al final esa chica tenia algo que las había enganchado a ambas.
Freen se encontraba esperando a que Jaidee saliera de la escuela, últimamente tenia demasiado trabajo y hacia que Jaidee lo acompañara al trabajo, ninguna niñera podía trabajar, o las que estaban disponibles Jaidee se negaba a ser cuidada por ellas, su única solución era Rebecca, pero jamás la volvería a contratar.

El celular de Freen sonó, haciendo que sacará de su mente a Rebecca. Era un correo. Al abrirlo y leerlo se percató que estaba en problemas graves.

Debía de viajar a Madrid por asuntos de trabajo la próxima semana, ¿el problema? no tenia con quien dejar a Jaidee, sus padres estaban de vacaciones y no podía dejarla al cuidado de sus empleados domésticos. Debería de contratar a alguien para que fuera con él hasta Madrid y cuidara de Jaidee, y aquí era donde más se complicaban las cosas, ¿quién seria capaz de hacerlo?.

(...)

— Vamos mamá, dile a Becky, seguro acepta — le había comentado a Jaidee acerca del viaje que haría, y como había conseguido una niñera, pero Jaidee seguía insistiendo que no quería a nadie mas que Becca

— Ya contrate a alguien mas, vamos seguramente te diviertes — Jaidee cruzó sus brazos y se fue enojada hasta su habitación, en esos casos Freen se lamentaba de haberla consentido en todo, pues a veces actuaba caprichosa.

Freen suspiró y subió detrás de la pequeña, seguramente si le prometía dulces y algún viaje al lugar que quisiera terminaría aceptando a la nueva niñera. Jaidee se encontraba en su cama abrazando un oso de peluche, hablaba con él sobre lo que acaba de suceder.

—Y mamá no quiere contratar a Becky, ella había sido tan buena conmigo, ¿sabes? Imaginé que ella era mamá.

Al escuchar lo que su hija había dicho Freen sintió un remordimiento. Jamás pensó que Jaidee pudiera extrañar a su madre.

  ¡Estas loca! —  exclamó Freen.

— No fue solo mi culpa, también fue la tuya. Ya regreso — la chica dejó en los brazos de Freen a la bebé y salió del departamento de la chica.

Freen había quedado en shock, ¿a dónde se suponía que iba la chica? En lugar de ir tras ella espero a que regresara, pero la bebé comenzó a llorar y fue en busca de la madre. Miró por todos lados, pero no había rastro de ella. Entonces entendió que había caído en la trampa, ahora eran él y la bebé.

Sacudió el recuerdo de su mente. Jamás logró encontrarla de nuevo, pero agradecía ahora ese hecho; la verdad era que él se encontraba feliz de tener solo a Jaidee, no necesitaba a una mujer a su lado, pero su hija no pensaba de esa manera. Se dio cuenta entonces de lo egoísta que había sido ella, Rebecca tenia derecho de haberla ofendido como lo había hecho.

Golpeó la puerta de la habitación y la abrió sin esperar respuesta.

— Buenas noticias. Rebecca ira con nosotros— el rostro de la pequeña mostró un felicidad inmensa. Dejó de lado su oso de peluche y corrió a los brazos de su madre para agradecerle. Freen sonrió ante la felicidad de su hija, ahora temía que Rebecca rechazara el trabajo.

BUSCANDO A MAMÁ (BAM #1) G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora