Este es un Fic-Teoría sobre lo que podría o no haber pasado si las cosas se hubieran dado en ciertas circunstancias...
⚠️-La portada no es de mi propiedad, se extrajo exclusivamente de Pinterest.
⚠️-Empezaré la historia en el momento en que termin...
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Más Ciegos que la Chucha
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Lake junto a Jake y Aiden, habrían continuado conversando y riendo en la banca, de no ser porque Aiden se había ensuciado de su helado al caerse, por estarse riendo. Así que la misma Lake se ofreció a comprarle unas toallitas para que pudiera limpiarse. Mientras los dos muchachos aguardaban la llegada de la europea, empezaron a conversar sobre esa historia en wattpad que a los dos les encantaba.
Sí, podrían ser frikis, pero al menos eran felices.
El de hebras bicolor estaba poniendo su máxima atención al mayor, quien estaba entusiasmado dando su argumento sobre por qué el protagonista debía quedarse con el tipo que parecía ser rudo y testarudo, pero por dentro tenía un corazón blando y bonito. Hablaba tan rápido que alguien normal apenas y le hubiera entendido la mitad de aquel vómito verbal, pero el menor hablaba su mismo idioma de friki, así que respondía con el mismo entusiasmo y velocidad. Hasta que, de repente, se dio cuenta de que se sentía observado.
Ignorante del motivo, miró de reojo a su alrededor para descubrir la razón de su sentir, pero cuando volteó la cabeza hacia su costado, tremenda fue la sorpresa que se llevó al ver al pelinegro de ojos esmeraldas, observándolos atentamente, en compañía de una morena de sudadera roja.
Claro que los reconoció, para un fanático como él no era demasiado complicado distinguir aún a larga distancia, a dos miembros del elenco original de su reality show favorito, Gabby y Tom.
Aiden se extrañó por la mirada que el hombre les dirigía, pero, una idea brilló en su cabeza al recordar la anécdota que Jake le contó esa misma mañana y decidió ponerlo a prueba él mismo.
-¡Oh, Jake! -exclamó de la nada, sobresaltando al peliazul quien dejó de hablar cuando el de hebras bicolor se lanzó a sus brazos y lo abrazó. Eso lo sacó de onda completamente, sabía que Aiden no era precisamente una persona cariñosa o afectuosa. -Jake, te quiero tanto, tanto, tanto.
-¿Y a ti que mosca te picó? -Pregunta extrañado el de orbes oscuras, incapaz de devolverle el abrazo debido a la extrañeza. -Uhm, Aiden, me estás ensuciando de helado.
Pero el de ojos aqua no le hizo ni caso, abrazándose con fuerza al cuello de Jake mientras veía la reacción del azabache. Sonrió para sí mismo al ver cómo el hombre fruncía el entrecejo mientras lo mataba con la mirada. Bingo.
-Ah, perdón. Es que me dio una sobredosis de afecto repentina. -Se excusó el menor, separándose rápidamente del de cabello azulado, ya había obtenido lo que necesitaba. -Oye, creo que Tom lleva un rato viéndote.
-¡¿Qué?! -medio gritó Jake, alarmado y avergonzado. En ese momento llegó Lake con una bolsa de compra donde traía las toallitas. La europea se extrañó de ver al mayor de los tres con un sonrojo bastante notable en su rostro y al E-Boy sonriendo con picardía.
