Mi kohai me secuestro

Día 6.- Jaque

Hazlo, hazlo, hazlo...

Repito esas palabras para darme valor y sumerjo toda mi cara en el culo de Kanaye, lo único que pasa por mi mente en este momento es, ¿Por qué?¿Por qué esto realmente no me asquea?, creí que vomitaría en cuanto lo tocara, pero mi lengua está lamiendo todo su orificio; entrando y saliendo, ¿Sera que...?, no, no, no, son las pastillas, estoy seguro...

- "Ah, ah, a-ah, s-senphwaii, ah, nhooaah."

La textura de la parte externa de su ano tiene una forma similar a unos labios pronunciando la letra "o", los leves surcos a diferencia de lo que parecería son suaves, la sensación de su culo apretando mi cara también es de otro mundo.

No lo parece pero al parecer Kanaye cuida que este bastante limpio.

Ya logré pasar todos los pedazos de la pastilla, el tiempo..., pasó volando.

- "Shempai-ghaa, s-se siente, ¡Kyaa-ghaa!"

Maldición, por experiencia puedo decir que el efecto de las pastillas es rápido, pero no inmediato, sin embargo, no sé cómo funcionara si se introduce como si fuera un supositorio, no puedo parar aquí, debo explotar todas las oportunidades.

Como si fuesen unos labios de verdad, Yuya intenta hacer un extraño y vulgar beso, poniendo fuerza en los labios y sellándolos en el pussyboy de Kanaye, este último se retuerce mientras grita y gime de placer, cuando el beso negro termina se deja caer con el culo apuntando hacia arriba y el rostro hundido en el futón.

- "Sabes Kanaye, no recuerdo habértelo dicho, pero mis abuelos vivían en una pequeña granja en las afueras de la ciudad y gracias a ellos de chico aprendí a ordeñar cabras... "

- "...~¿?"- Kanaye no responde, pero parece que trata de recomponerse e intenta ponerse de pie, cosa que Yuya interrumpe tomándolo de su Willy.

Con una mano basta para poder manejarlo, y como si fuera una ubre, empieza a jalar hacia abajo.

- "N-no, no, no, n-no, ¡kyaa-Shempaii, eshperaaa~~~!"- Dice mientras vuelve a retorcerse como a una babosa después de tirarle sal.

El ordeño hace que el hilo pegajoso que estaba antes se rompa y una repetidamente, tejiendo nuevos caminos que conecten con la punta.

Con la otra mano decide apretar los contenedores de esperma, este contesta gimiendo mientras su cuerpo entero tiembla de placer, con una sonrisa de victoria, Yuya hace su último movimiento y vuelve a hundir su rostro en el culo de Kanaye.

- "Ghaaag mmghh. M-mhe vas a volver mmmghh locaaa."

Poniendo cada vez más intensidad en su boca a la vez que se vuelve menos gentil con las manos, en este punto Yuya solo piensa en la victoria mientras que Kanaye...

Lo amo, lo amo, lo amo, lo amo, senpai, senpai, está lamiendo mi... mi... se siente tan bien, lo amo, lo amo, lo amo.

Es entonces cuando Yuya siente como se tensa el esfínter de Kanaye que decide exprimir con sus manos su polla y testículos, haciendo que una gran carga salga disparada mientras gime y tiembla de placer.

Kanaye ya tenía medio antifaz afuera, así que decide mirar de reojo, es ahí cuando Yuya ve como su plan parece estar dando frutos, los ojos brillosos de Kanaye miran ahogados en placer, como si suplicara más.

Entonces, con la mirada intoxicada de Kanaye como testigo, decide lamer sus dedos mientras esos ojos lo miran fijamente.

Este se sorprende por un momento y contesta con una gran y perversa sonrisa de satisfacción.

Puse toda la fuerza que tengo en mi abdomen para poder controlar las ganas de vomitar, mierda, esta jodida, ¡JODIDA! textura pegajosa no se quita de mi boca.