«La rosa Cherokee»

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T.2;Ep4: “La rosa Cherokee”

*

Apenas me desperté Maggie corrió a traerme el desayuno. Recién amanecía y yo ya estaba cargada de energías, bueno no tanto, pero mejor que antes.
Hershel tenía razón, necesitaba descansar para recuperarme más rápido.

No me había levantado con una superfuerza como para levantar un árbol, pero me sentía lo apropiadamente bien como para ayudar en algo.
Hershel no se negó, al parecer mí mejoría se hizo notoria. Mi piel había recuperado su color, y por más que siguiera algo herida, necesitaba moverme un poco, el encierro me hacía querer correr por las paredes.

Lori corrió a mi habitación apenas se enteró que ya estaba despierta, entró y me miró con una sonrisa de oreja a oreja.

—¡Despertó! —Me avisó feliz y me sacudió la mano, solté un quejido, mis huesos aún se sentían un poco débiles. —Lo siento, me emocioné. —Se disculpó. Yo sonreí y me pare junto a ella para ir a ver al niño.

En la puerta de la habitación se encontraba el oficial mirando feliz a su hijo, apenas nos vio sonrió aún más.

—Preguntó por ti apenas despertó. —Solto el sheriff haciéndose el ofendido. Yo reí y Grimes me dedicó una sonrisa. —Pasa.

Apenas ví al niño éste sonrió de oreja a oreja. Me senté lentamente en el sillón a su lado y lo miré con una media sonrisa.

—Si que eres una bestia, mi hombrecito. —Dije y golpeé su codo suavemente para no lastimarlo. El niño tomó un color rojo ante el comentario y ambos reímos.

—Lo último que recuerdo ver es a ti cargándome, ¿corriste mucho hasta aquí? —Me preguntó curioso.

—Eres tan liviano como una pluma, debes comer más. Así serás tan fuerte como yo, y luego tú podrás cargarme en brazos. —El niño se rió y yo no pude evitar sonreir.

—¿Crees que quede una cicatriz? —Me preguntó mirando a su abdomen algo preocupado.

—Así es. —Le contesté y el niño me miró preocupado. —Una muy genial. —Enseguida la expresión preocupada del niño se convirtió en una gran sonrisa de orgullo.

—Pues tu tienes muchas, y te ves genial. —Me halagó.

—Mirate, todo un picarón, mi hombrecito. —Dije y toque su nariz. Carl río una vez más y se puso el doble de rojo.

*

Me encontraba afuera con Lori, ambos sonrientes luego de ver lo feliz que se puso Carl al ver a Sheena.
El ruido de unos vehículos me llamó la atención, en cuanto levanté la vista vi los vehículos del grupo, los faltantes.

Enseguida apenas llegaron todos bajaron a preguntar cómo se encontraba Carl, pero Daryl parecía buscar a alguien más.
Glenn me miró con gracia y me lanzó una mirada pícara, me reí ante aquello y entendí de que se trataba.

El ballestero buscaba con la mirada a alguien que no se encontraba ahí afuera, se lo veía preocupado al no verla. Apenas me separé del abrazo de Dale, Dixon se acercó.

—¿Y Sheena? —Me preguntó nervioso, se lo notaba inquieto.

—Wow, tranquilo vaquero. Tu chica se encuentra bien, está adentro con Carl. —Bromeó Glenn y yo sonreí ante aquello. Daryl simplemente miró mal al asiático y entró rápidamente a la casa, no le importó nada más, quería saber si ella estaba bien.

You are that shine. -Daryl Dixon × Female Oc-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora