El "Último"

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Masajee mi cien aburrida de esto, la puerta del despacho de Chika se abrió, ahí habíamos tenido la reunión todos juntos, y luego de tres horas de charlas y discusiones mande a cada uno a su casa. No podía poner en peligro a los chicos cuando probablemente había un soplón ahí dentro

Mire a Edward entrar a la oficina con una charola, me recompuse mirándolo

Te traje la cena y algunos analgésicos.- dijo a mi, le miré neutral para luego simplemente apoyar mi frente en el escritorio

Dios, no doy a más...- me queje en un hilo de voz, lo escuche soltar una risilla dejando la charola en la mesa

¿Cómo te sientes?- pregunto con cuidado, frotando mi espalda, sabía que se refería a lo de esta mañana, me encogí de hombros cerrando los ojos disfrutando el masaje que empezó a dar a mis hombros y cuello

《¿En que quedaste con esos niños?- pregunto, abrí mis ojos y suspire

Se mantendrán al margen, e ignoraran esto hasta que yo esté lista.- dije con calma mirándolo, asintió con calma

Come algo mocosa, fue un día difícil- me sonrió calidamente, le devolvi la sonrisa y asentí a duras penas, llevaba semanas sin dormir o comer bien. El sueño lo compensaba con café cargado o algunas pastillas, pero el ardor en mi estomago por falta de alimentos era una tortura

Gracias Ed- le sonreí, tomando los cubiertos para así disponerme a comer lo que preparo para mi, sin poder detener los pensamientos de mi cabeza, di el primer bocado, la carne sabía delicioso

¿Qué harás?- pregunto momentos después cuando ya iba a terminar mi plato, mastique lo de mi boca y tome el vaso de jugo para pasar la comida

Comprare al rector. No puedo dejar que los expulsen o les canceles sus ligas.- explique, el simplemente me miró con calma

¿Están en medio de una, no?, son finalistas- dijo con calma, asentí tomando el ultimo trozo de papa frita para meterlo a mi boca

Eleve la mirada cuando escuche la puerta del despacho ser tocada

Adelante.- dije terminando mi jugo, mire entrar a Brian con un par de cuadernos en sus manos, me miró y luego miro a Ed

Tengo informes señorita.- aviso, asentí, sabía a qué se refería

Puedes retirarte Edward, gracias por la comida.- le sonreí, el me miró y asintió con calma para así ponerse en pie, rodear el escritorio y tomar la charola. Beso mi coronilla, le mire curiosa, últimamente había cogido esa maña de hacerlo

Me alegra que hallas comido, me iré a casa ahora. Seguramente el niño me espera- dijo tranquilo, asenti a el con calma y lo mire salir, señale el asiento frente al escritorio para Brian, el se sentó frente a mi y dejo mi cuaderno negro frente a mi

Mañana se pondrá en marcha la captura de Karin, seria el último en la lista para así proseguir con la señorita Chonchest y acabar con el señorito Brown.- dijo a mi con calma, una sonrisa surco mi rostro sin poder evitarlo, tome mi cuaderno y acaricie su portada con lentitud, yacía varios días que no lo tenía en mis manos

Perfecto Brian, excelente trabajo. Que sea antes de la escuela, por la mañana, el siempre va en moto por la avenida principal- explique con calma, el asintió

Lo leí en su cuaderno señorita- dijo con total tranquilidad, abrí mi cuaderno y lo revise, centrándome en las páginas donde tenía toda la información de James

Disfrutare tanto arruinarte.- dije para mi misma, mirando el nombre de James escrito en perfecta cursiva y en tinta roja

Mañana no podré ir a dejarla a la escuela para poder encargarme yo mismo de la captura del señorito Karin.- eleve la mirada a él- le diría que fuese sola en el auto, pero aún no tiene licencia de conducir, tampoco sería correcto que fuese simplemente con el señor Edward, según se, el señorito Lanco esta en problemas y llegará tarde a la secundaria.- me recosté en la silla y revise mi cuaderno

Que me lleve Cristian.- dije con calma, el me miró un tanto sorprendido

¿Mi hijo deja que le llame así?- pregunto, con la incredulidad latente en su voz, eleve la mirada

No le doy opción, de hecho.- le sonreí, abrió y cerró su boca queriendo decir algo, más no dijo nada y simplemente asintió mientras una pequeña sonrisa surcaba su rostro, me dio curiosidad su expresión más no dije nada

Esta bien señorita, le diré a mi hijo.- dijo levantandose, asentí y lo mire salir, suspire pesado dejando de lado mi cuaderno para así disponerme a terminar mis tareas, para poder seguir leyendo los documentos e información de los que trabajaban aquí, necesitaba encontrar a esa rata lo más pronto posible

Sonrei de forma ladina ante la idea, mirando mi cuaderno. Estaba tan emocionada ante la idea, por fin, por fin llegaría a Neire, por fin después de tanto tiempo la tendría para mí...

Pero a quien más ansiaba tener de rodillas implorando perdón, era a él. James, ese maldito bastardo, lo quería implorando que lo matará, puesto la muerte sería lo único que lo salvará de mí, de mi furia y de mi odio.

La Nerd Mafiosa (Trilogía Freschus #2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora