Como Si Nada

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Me levante temprano, como de costumbre. Miré a Cristian parqueado frente a la mansión de papá en su moto con dos cascos, me pare frente a él, llamando su atención. Me sonrió levemente dejando su lindo y perfecto oyuelo formarse en su mejia derecha

Buenos días señorita- saludo, le mire y suspire

¿Iremos en tu moto?- pregunte, el simplemente sonrió un poco más y me acerco uno de los cascos, lo tome y lo mire, era como morado con líneas en forma de flores en color dorado

《 Mis colores favoritos.- pensé en voz alta

Lo sé.- lo escuche, eleve la mirada curiosa, para luego devolverle la sonrisa

Esta bien, vamos.- dije con calma, me acomode mi mochila a la espalda, y el nego para así quitármela y ponérsela al frente, se subió a la moto

Suba, no querrá llegar tarde- dijo con calma total, solté una leve risa y asentí, poniéndome el casco para así subirme a su moto

Con permiso- dije, antes de rodear su cintura con mis brazos para aferrarme a él, miró mis manos y acaricio una de ellas, asintio para si mismo y puso su vehículo en marcha

Condujo de forma moderada, cosa extraña en el puesto siempre conducía como si lo fuesen siguiendo. En el camino, de vea en cuando acariciaba mi pierna para asegurarse que estaba perfectamente o me miraba por el espejo retrovisor

Sonreí, era lindo, aunque siempre estuviera todo serio

Al llegar al instituto, baje de su moto y le sonreí, extendiendole el casco

Gracias por traerme- dije con calma

Un placer, la recogeré a la salida también.- aviso, devolviendome mi bolso, asentí y le sonreí tomándolo, miro algo detrás de mi y beso mi mejía antes de apartarse otra vez, sentí mi rostro arder por su acción, podía jurar que estaba sonrojada, de eso no tenía duda

《 Que tenga un excelente día.- me sonrió, para luego irse, le mire curioso acariciando mi mejía, esa que el antes beso. Me encogi de hombros sin darle importancia para así seguir mi camino

Respiré hondo para calmarme, y así irme directamente al interior del lugar, salude a Edward con la mano al verlo en la puerta del instituto, tenía una expresión completamente seria y molesta, asintió a mi y se fue al interior

¿Mmmm?, que raro.- murmure para mi misma sin detener mi camino, me fui directamente al despacho del rector, necesitaba hablar con él.

Sabía que aceptaba sobornos, varios alumnos más de una vez se habían metido en problemas, y luego de que sus padres vinieran a hablar con el, ellos andaban como si nada por el instituto

"Lo que hace el dinero.", pensé; al llegar a la oficina del rector toque esta con cuidado, entrando segundos después de que el me diera pase.

Buenos días rector Kimbrell- salude a él, señaló una de las sillas frente a su escritorio y tome asiento. Era un hombre mayor, su cabello color café con la mayoría lleno de canas, usaba un traje color negro de segunda mano, se notaba por el desgaste de los botones, los lentes cuadrados que tenían demasiado aumento, una pequeña barba en la barbilla que igual estaba llena de cabellos blancos, y su panza cervecera que sobresalía por la pobre camisa de traje, siempre temía que uno de esos botones volarán ante la presión y me sacarán un ojo

Buenos días señorita Monshiten, ¿que la trae por aquí tan temprano?- me sonrió, sonrisa que devolvi- por favor dígame que no ha ocurrido otro incidente con la señorita Chonchest.- dijo mirandome

Oh, no, no. No vengo por ella en esta ocasión, me gustaría hablar de otro tema con usted por favor, de antemano, le pido que en el lapso de esta conversación me trate como un adulto que viene por algún problema de su hijo.- pedí amablemente, se reclino en su silla mirandome expectante

"Por favor Dios, que sus botones sigan aguantando y no salga tuerta de este lugar.. ", rogué, manteniendo mi sonrisa cortes para el

Me impacienta su actitud señorit Monshiten, ¿tiene algo que la preocupe?- pregunto, con la intriga acariciando cada una de sus palabras. Le sonreí y abrí mi mochila para así sacar la chequera que me dio mi papá, todas estaban firmadas por el, la tenia desde yace un año, el siempre me daba una nueva para año nuevo aso no tendría de que preocuparme si ocurría algo, esta sería la primera vez que la ocuparía en este año

Estoy aquí por Keny Wesley y el equipo de béisbol señor.- dije con calma total, sonriendo por mis adentros al notar su mirada intrigada en la ristra de papeles que saqué de mi bolso

《 Le agradecería que no pusiera tapujos en la conversación, como sabe, tengo clases a las cuales asistir en unos minutos.- segui, escribiendo una cifra en el cheque, lo arranque y lo deslice por su escritorio

¿Qué se supone que hace, señorita Monshiten?- pregunto, fingiendo indignación

¿Le parece muy pocos ceros aún?, según yo conté siete.- le sonreí con fingida inocencia, sus ojos se abrieron de par en par al escucharme e inmediatamente salto al cheque sobre su escritorio para así tomarlo y contar cada uno de esos ceros, trago en seco y me miró

Señorita Monshiten.- me sonrió de forma aduladora, guarde la chequera en mi bolso otra vez- sus amigos pueden integrarse a sus clases hoy mismo si así ellos lo desean.- agregó, le sonreí y me puse en pie

Me alegra escuchar ello, tomo una sabía decisión señor Kimbrell- extendi mi mano, mano que el estrecho inmediatamente sin dudarlo

Un placer tenerla en mi oficina tan temprano- alego el con seguridad, asentí con calma

Me alegra que nos hallamos entendido, señor Kimbrell.- dije con calma, luego de unos momentos más salí de su oficina sintiendo un peso menos en mis hombros

Agradecía que se halla ahorrado el teatrito de indignación y ofensa, saque mi teléfono de mi bolso al escucharlo sonar

Si, diga- dije luego de contestar la llamada sin fijarme quien era, caminando hacia mi salón

"Señorita, ya tenemos al señorito Karin en la camioneta, vamos rumbo a la mansión."- una sonrisa ladina surco mi rostro

Perfecto Brian, recuerda llevar su preciada moto tambien.- dije con calma total, voltee hacia atrás cuando escuche un sonido, frunci el ceño al no ver a nadie

"Claro que si señorita, asi será. Todo estará listo para cuando llegue a casa nuevamente"- alego, retome el camino sin borrar mi sonrisa

Siempre tan eficiente Brian, luego de esto, al fin podremos poner en marcha el plan hacia Neire.- dije tranquila, asintiendo para mi misma

"Claro que si señor. Lo único seria que el señor Edward no llegase a la mansión hoy"- suspire

De él me encargo yo, tenemos un trato, aun no puede enterarse de esto.- me detuve un pasillo más antes de llegar al salón

"Entiendo señor, contamos con ello."- dijo con calma, asentí para mi misma y colgué la llamada

Mire de reojo detrás de mí, para así simplemente guardar mi teléfono y seguir mi camino al salón

"Me encantará ver que haces, Edward.", pensé, entrando al salón

La Nerd Mafiosa (Trilogía Freschus #2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora