¿Potter o Black?

34.- Regulus

Habían pasado ya dos semanas desde aquella noticia. Stella por supuesto seguía igual que el primer día, hoy tocaba visita al cementerio donde se encontraba el ataúd de Regulus Black...

Stella se puso un vestido negro que llegaba a sus rodillas y tenía cuello de tortuga, en el camino compro unas rosas pues estaba segura que las había llevado hace una semana podrían estar resecas.

Su sorpresa al llegar fue cuando vio a Sirius Black y James Potter parados frente al altar de su esposo, se acercó con cautelo y al llegar coloco las rosas en el ataúd y se puso a un lado de ellos sin decir ni una sola palabra.

-¿Qué harás?- Fue Sirius quien rompió el silencio que había

-¿Perdona?

-Te conozco lo suficiente para saber que lo vengaras

-Yo... no lo sé aún

Stella si lo sabía, pero no podía decir que su plan era matar a Voldemort pues se suponía que estaba de su lado ¿no?

-Mamá quiere verte- habló James, y si, Euphemia Potter quería hablar con su hija y pedirle perdón por todo

-Ella dijo que no era mi madre, no se porque querría verme

-Desde que vio en el profeta que Regulus estaba... pues... quiso verte

-Dilo James, Regulus está muerto

Stella limpio sus lágrimas para después voltear a verlo

-Muerto ¿si?

Y sin más se fue de ahí, los últimos días de Stella eran muy rutinarios, de su casa a la casa de los Malfoy pues no toleraba estar sola en su casa pues había recuerdos de Regulus por todos lados, para lo único que iba era para dormir.

-¿Cómo estás peque?

-Igual que siempre Lu, muerta por dentro y viva por fuera

-Ven acá pequeña, escucha, se que te duele, Regulus fue tu compañero de vida hasta su último día y no será fácil de olvidar y lo sé, y aquí estaré yo para ayudarte y apoyarte ¿si?

Esos habían sido las últimas dos semanas de Stella, estar con Lucius y Narcissa ayudandoles con todo lo del bebe para tratar de olvidar todo...

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Después de aquel encuentro hubo junta de mortifagos, a la cual Stella decidió ir, en esta se habló de las siguientes misiones que habría, de los siguientes traidores a la sangre que torturarían y más.

Hasta que Voldemort llegó a cierto punto...

–Bien, creo que todos sabemos lo que pasó hace dos semanas, el traidor de Regulus se murió ¡bravo!

Stella no tardo nada en levantarse de su asiento y una vez que lo hizo asoto sus manos en la mesa para obtener la atención de Voldemort y una vez que la obtuvo lo apunto

–Escúchame bien, no vuelvas a mencionar a Regulus Black, vuelve lo a hacer y te juro que te vas a arrepentir de haber nacido, ¿querías que tuviera el suficiente poder para estar a tu lado no? Pues vuelve a mencionar a Regulus y sabrás que lo tengo, no te tengo miedo

Lucius jalo a Stella del brazo diciéndole que se sentará obteniendo un retundo no por respuesta por parte de Stella mientras se soltaba de su agarre

–Ya te lo dije Tom Riddle, vuelve a mencionarlo y me vas a conocer, vas a conocer a Stella Black Potter

Y una vez dicho eso volvió a tomar asiento

–Vaya vaya, si hasta mi nombre dijiste Stella, pues creo que si tienes el poder suficiente, así que hoy iras a una misión con Pettigrew

Dicha misión trataba de ir a casa de los Potter a investigar cómo iba todo, así que así fue, ambos se dirigieron

–¿Estas demente acaso Stella? ¿Como te atreves a encarar así a Lord Voldemort?

–No le tengo miedo ni a el, ni a ti, ni a nadie Peter

Una vez dicho eso se adelanto y fue a tocar el timbre de la casa de los Potter, al abrir la puerta fue recibida por una muy embarazada Lily Potter

–Wow... así que si estas embarazada

–Oh si, tengo 4 meses, pero, ¿a que debemos ti visita Stella?

–Viene conmigo Lilyflor

Al momento de que Lily vio a Peter asintió y los dejó pasar a ambos a la casa, Stella al pasar examino cada rincón de la casa hasta ver un recuadro que llamó su atención.

–James creyó que era buena idea tenerlo, el cree que ella aún existe...

Era un cuadro de Stella y James de pequeños, una foto que Euphemia les había tomado mientras ambos dormían abrazados

–Yo... por ahora esa Stella no se si exista, ¿James esta en casa?

–No, salio a comprar algunas cosas para Harry

–¿Harry? ¿Quién es Harry? ¿Su perro?

–Oh no– Lily río –Harry es tu sobrino– dijo tocando su vientre

Stella se sentía tan mal de estar haciendo esto, pero ella sabía que todo tenía un propósito, y ese propósito era salvar a James, sus padres y Harry, pues eran la única familia que por ahora tenía.