Un caballo, dos petirrojos y tres mariposas

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Todo tiene un comienzo, igual que esta historia. Empieza con unos pequeños chicos que se encontraban escondidos de sus padres. El primer pequeño, era el hijo de los granjeros del pueblo. Su nombre era Bill y tenía un desordenado pelo castaño que todos decían que no era tan precioso como sus ojos color ámbar y su tono de piel moreno. El segundo pequeño, era el hijo médico del lugar. Su nombre era Caleb y tenía el mismo color pelo color negro y ojos verde esmeralda de su difunta madre al igual que su piel clara. El tercer y último pequeño, era el hijo del hombre más rico y dueño del pueblo. Su nombre era Richy y él era un niño rubio, el cual pensaban que estaba maldecido porque tenía síndrome de Alejandría y albinismo.

Los niños de diferentes clases se encontraron a los ocho años mientras se escondían y, se hicieron buenos amigos.

 - Oye Richy ¿es cierto que tienes una maldición? – Preguntó Bill

 - La verdad, es que no lo sé. Mi padre dice que no y que solo son rumores. – Le respondió Richy mientras jugaba con sus manos. 

 - Mi padre dice que es una enfermedad y que es algo normal. – añadió Caleb a la conversación.

Y con conversaciones tan simples como esas, ellos se volvieron aún más unidos, pero el hecho de no poder verse seguido por la diferencia social era muy difícil para ellos, ya que a veces no tenían tiempo para verse. Pero nada les detuvo y así pasaron 10 años de amistad.

Un día en la granja de los padres de Bill, este, estaba cepillando a su caballo favorito. Un caballo blanco con manchas marrones y cabello color negro.

 - Oh Perla, ¿por qué tienen que existir las diferencias sociales? Digo, entiendo que haya gente con más dinero que otras, pero ¿por qué eso no tiene que separar? - le preguntaba el chico.

La yegua solo relinchó. Un momento después de ese relincho, Bill, escuchó un ruido proveniente del alrededor de los establos, así que salió para ver que sucedía. Ahí descubrió a Richy y a Caleb, que apenas salían de entre los arbustos. 

 - ¡Richy, Caleb! ¿qué hacéis aquí? Os pueden descubrir. 

 - Queríamos verte y yo quería deciros algo a los dos. – dijo Richy 

 - Ja, Ja, que casualidad, yo también necesitaba deciros algo. – Dijo también Caleb mientras se le empezaba notar un leve sonrojo.

 - Bueno, ya que todos tenemos algo que decir digámoslo a la vez. – propuso Bill

Ninguno se esperaba que todos dijeran lo mismo. Estaban enamorados y al saber que los tres tenían los mismos sentimientos, se dieron un fuerte abrazo mientras se sonrojaban y sonreían por lo raro que se sentía todo en ese momento. Después de hablar un rato, los chicos se fueron porque los padres de Bill llegaron. Aunque fue por sorpresa, aquella hermosa relación amistosa se volvió amorosa. 

El trío poliamorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora