𝐘𝐎𝐔 𝐋𝐎𝐕𝐄 𝐌𝐄? | 𝗺𝗶𝗸𝗲 𝘀𝗰𝗵𝗺𝗶𝗱𝘁 𝘅 𝘁𝗻

0 9.

Aquel sueño otra vez, aquel sueño que siempre se repetía con los mismos sucesos como un puzle volvió a ocurrir, como siempre, la menor lo tomo con normalidad al saber de qué se trata, si no es Mike corriendo detrás de aquel auto, era ella siguiendo el auto con ese hombre que se lleva al pobre Garrett. Parecía como si nunca llegara a tener un fin.

Entonces

Todo se detuvo, la menor abrió los ojos, casi pegando un grito al cielo al ver lo que se encontraba enfrente de ella, el bosque donde solía ver todo lo que ocurría con el hermano de Mike no era más que un bosque consumido por cenizas. Parecía el mismo infierno.

"_________"

El susurro con la misma voz de siempre hizo eco por el lugar. La menor comenzó a caminar sin dirección alguna, sentía como su piel ardía y un viento atroz inundaba el sitio. La joven de ojos divinos seguía su paso, sin saber a donde iba, es como si alguien o algo la llamara y la llevara hasta un punto donde no sabía donde podría parar. El camino fue largo, pero una silueta poco a poco comenzaba a distinguirse a lo lejos, poco a poco con los pasos que daba la silueta frente a ella comenzaba a tomar forma, se encontraba de espaldas, pero era suficiente para saber de quién se trataba, era Vannesa.

―¿Vannesa?

Pregunto la menor. Vannesa se giró para verla a la cara, ella sonreía, sonrisa carismática que solía hacerla única, Vannesa miro por atrás de la menor, borrando poco a poco su sonrisa y convirtiéndola en preocupación y sollozos.

―¿Qué? ¿Qué sucede Vanne? ―la menor trata de encontrar sus ojos, no entendía lo que sucedía con ella, el porqué de la nada comenzó a llorar.

―!"________" él viene, nada lo detendrá!, ¡todos corren peligro en ese lugar!, ¡no, no puedo hacer nada para impedirlo!, ¡"_______" deben salir de allí, corren peligro!―decía Vannesa alterada, tomando de los hombros a la menor.

―¿Quién Vannesa? ¿Quién?

―¡Tú sabes quién es, es, es solo cuestión que puedas recordarlo!

La alarma sonaba sin control alguno, despertando a la menor. La menor gimió por el dolor tan insoportable que tenía en la cabeza, se sentó en su cama llevando su mano hasta su cabeza, sobando esta, pero el dolor era igual que el de una migraña. Abrió los ojos, estos al tenerlos entre cerrados, mirando como en su cama ya hacía una mancha de sangre sobre la sabana, lo que parecía ser que provenía de su nariz, por instinto llevo su mano hasta su nariz, y efectivamente, esta se encontraba sangrando, pero era un sangrado ya poco seco, lo que indicaba que llevaba minutos de haber comenzado el sangrado.

Se puso de pie dispuesta a quitar la sabana de su cama, pues sabia que su madre entraría en pánico si de pronto llega a ver eso en la sabana, haciendo que solo la preocupación de sus padres crezca y lo que menos quiere es provocar problemas.

Abrió la llave de agua de su bañera, colocando sus fragancias favoritas y se sumergió en la bañera, no había nada mejor que un baño con agua tibia y sus fragancias favoritas para relajarse, o pretendía, el dolor de cabeza no la dejaba, pero sí que funcionaba el baño, pues la relajaban un poco.